En su nueva película “Pom magnífico: la mejor película nunca vendida” (Pom Wonderful: The Greates Movie Ever Sold), el director Morgan Spurlock hace un sátira de la táctica de colocar productos como publicidad dentro de las películas y programas de televisión.
Intentando conseguir financiamiento para este proyecto, el director se encarga de mostrar a la audiencia el proceso por el cual los realizadores cinematográficos tienen que atravesar para conseguir el dinero para producir sus películas.
Después de muchas negativas, Spurlock logra que la compañía Pam Wonderful lo patrocine.
Spurlock, quien en su película Super size me: Super tamaño se alimentó exclusivamente de McDonald’, cree que estos negocios ponen en juego la credibilidad de los directores.
El realizador afirma que él mantiene el control creativo de sus películas y dice que no quiere desanimar a los directores que tienen que acudir a estos acuerdos con corporaciones, siempre y cuando ellos puedan mantener sus derechos.