Gritos con la palabra “¡vergüenza!”, recibieron al ex director del Fondo Monetario Internacional, Dominique Strauss-Kahn, a su arribo a la corte en Nueva York, este lunes 6 de junio de 2011, donde se declaró no culpable de la acusación de ataque sexual contra una empleada del hotel en el que se hospedaba.
Strauss-Kahn llegó acompañado por su esposa, la periodista francesa Anne Sinclair, y el equipo de la defensa, todos ellos con el semblante serio, según destacaron los testigos.
Unas 100 mujeres se congregaron frente a la corte vestidas como mucamas, gritando “vergüenza”, a tal volumen que, según informa la agencia France Press, se podían escuchar desde el salón de la corte en el piso 13º, donde Strauss Kahn presentó su declaración ante el juez Michael Obus.
La próxima audiencia se realizará el 18 de julio de 2011.
La denuncia
Strauss-Kahn fue denunciado por una mucama originaria del oeste de África, quien declaró que fue atacada mientras trabajaba en el lujoso hotel Sofitel, de Nueva York. El ex director gerente del FMI enfrenta siete acusaciones que incluyen intento de violación, en lo que la acusación definió como un ataque brutal.
Strauss-Kahn podría enfrentar hasta 25 años en prisión si es declarado culpable de los cargos presentados contra él, entre los que figuran intento de violación y abuso sexual.
El ex jefe del FMI fue detenido el 14 de mayo cuando se disponía a viajar a París en un avión de Air France, tras el presunto abuso. Pocos días después de su arresto, renunció a su cargo en el FMI.
Su acusadora, una mujer africana de 32 años que trabaja en el hotel Sofitel de Nueva York, dice que había entrado a la suite de Strauss-Kahn para limpiarla, creyendo que estaba desocupada, cuando ocurrió el ataque.