El TLC y la ayuda militar entre Colombia y Estados Unidos, ha permanecido en la agenda diplomática entre ambas naciones por varios años, pero ha llegado el momento de cambiar.
Según el Embajador de Colombia en Washington, Gabriel Silva, ha llegado el momento de establecer una nueva dirección diplomática entre su país y Washington, algo que él mismo calificó como un “diálogo de tú a tú”.
"El Presidente Santos ha dicho que queremos un diálogo de tú a tú, donde entendamos que además de los temas de seguridad y defensa, tenemos una convergencia importante para trabajar en temas globales y regionales; y para colaborar mutuamente, en igualdad, para encontrar solución a los problemas que afectan a la región”, dijo Silva, a la Voz de América.
Para el embajador colombiano, una señal inequívoca de ese nuevo enfoque en la relación bilateral, es el próximo envío a Colombia del segundo funcionario más importante del Departamento de Estado, el subsecretario James Steinberg, encabezando una delegación de altos diplomáticos estadounidenses.
"Este primer esfuerzo que ocurre muy temprano en la administración de Juan Manuel Santos confirma que la administración del presidente (de Estados Unidos, Barack) Obama ha acogido la tesis de la necesidad de un diálogo ampliado de alto nivel”, detalló el funcionario colombiano.
Otra prueba del cambio de enfoque en la relación es el hecho de que la agenda no se centra en temas de seguridad, derechos humanos, democracia, energía, ciencia y tecnología, hacen parte de las prioridades.
Silva explicó que con los nuevos puntos a tratar, su país está muy contento “porque ahora se intensifican las relaciones no porque tengamos un problema, sino porque tenemos una agenda."
Esta nueva aproximación a la relación bilateral, busca tener como punto de partida la experiencia de Colombia como ejemplo para ayudar a solucionar los problemas de seguridad en la región.
"...Paradójicamente hoy, la mayoría de la agenda de la región está gravitando hacia la agenda de Colombia porque los problemas de seguridad, defensa, crimen organizado y narcotráfico son realidades que amenazan a toda la región. Y más que seguir de ejemplo, queremos servir de contrapartes, de socios, de amigos para la región”, argumentó el embajador.
Sin embargo, el diplomático colombiano dejó claro que la aprobación del TLC y la seguridad militar siguen siendo prioridades para su nación, aunque cada tema evolucionará a su propio ritmo.