El ministro de Relaciones Exteriores ruso, Sergei Lavrov, dijo el viernes que la coordinación entre las fuerzas armadas de Rusia y la coalición encabezada por Estados Unidos es necesaria para evitar “incidentes no deseados” en Siria, donde ambos países tienen presencia militar.
En días recientes autoridades estadounidenses criticaron a Moscú por aumentar su apoyo a las fuerzas armadas del presidente Bashar al-Assad discutiblemente por un doble propósito, combatir a los insurgentes en el país y al grupo terrorista Estado Islámico.
Lavrov enfatizó a los periodistas el viernes, en Moscú, la importancia de acciones coordinadas por parte de los aliados involucrados en el conflicto sirio, incluyendo el gobierno sirio, porque una campaña aérea no es suficiente para terminar con los militantes del grupo Estado Islámico.
Aunque Rusia ha negado que esté expandiendo su presencia militar en Siria, Lavrov reiteró la intención de Moscú de continuar el envío de armas al Ejército sirio para asegurar sus capacidades de defensa en la lucha contra militantes islámico, mientras cumple con la ley internacional.
Autoridades estadounidenses han expresado preocupación de que Rusia pueda atacar grupos insurgentes pro occidente en el conflicto armado con las fuerzas de Assad, arriesgando una confrontación con fuerzas que luchan contra el grupo Estado Islámico.