Los cancilleres y ministros de Defensa de Unasur acordaron solicitar al Consejo de Seguridad de la ONU una reducción en el número de tropas desplegadas en Haití como parte de las misiones de paz de Naciones Unidas.
El canciller uruguayo Luis Almagro dijo que los cancilleres de nueve países sudamericanos que aportan soldados a las misiones de paz quieren reducir el número de tropas a los niveles previos al devastador terremoto del año pasado que azotó al país caribeño.
Unos 2.000 cascos azules adicionales fueron enviados a Haití para ayudar a la nación tras el terremoto que mató a más de 200.000 personas y dejó cientos de miles de sobrevivientes sin hogar, viviendo en tiendas de campaña.
Los funcionarios creen ahora que las condiciones han mejorado lo suficiente como para retirar parte de las tropas adicionales.
"Nos parece que se justifica una discusión, un examen del número de efectivos, quizás a un nivel un poco más bajo en la medida en que se había aumentado después del terremoto”, dijo el canciller de Brasil, Antonio Patriota.
Más del 40% de las fuerzas de paz de la ONU en Haití son de Sudamérica.
La decisión fue acordada el jueves 8 de septiembre en una reunión en Montevideo, Uruguay, en medio del escándalo causado por el presunto abuso sexual de un joven haitiano por parte de cinco cascos azules uruguayos en Port Salut, en el sur de Haití.
En un video divulgado la semana pasada, en la que se registraron indicios del supuesto abuso con un teléfono celular, se ve a un joven haitiano siendo sostenido por dos militares en un catre mientras otro uniformado semidesnudo se arrodilla sobre él. Hay risas generalizadas.
Si bien informes preliminares de la ONU, el Ministerio de Defensa de Uruguay y la Armada uruguaya concluyeron que no hubo abuso sexual, la agresión contra el joven haitiano fue condenada enérgicamente por las autoridades uruguayas, de Naciones Unidas y de Haití.
Uruguay respondió con firmeza ante el grave incidente, que amenaza con dañar la imagen de las misiones de paz de la ONU en la isla, iniciando una investigación que quedará en manos de la justicia militar y civil uruguayas para proseguir con los mecanismos legales correspondientes una vez que los marinos sean repatriados.
La ONU inició su propia investigación sobre el caso y anunció que repatriará a los soldados una vez que concluya.
No obstante, el organismo internacional destacó las medidas implementadas por Uruguay ante el caso: "La respuesta de Uruguay, como país contribuyente de tropas, ha sido extremadamente positiva y responsable", aseguró el vocero del secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, Eduardo del Buey, según consignó el periódico La República.