Raúl Castro critica sanciones de EE.UU. a Cuba, Venezuela y Nicaragua

El ex presidente cubano Raúl Castro acusó el jueves a Estados Unidos de estrechar "la soga" en torno a su país, Venezuela y Nicaragua, pero prometió "responder a cada desafío".

"Para nosotros, al igual que para Venezuela y Nicaragua, está muy claro que la soga se está ajustando, y nuestra gente necesita estar preparada para responder a cada desafío con unidad, resolución, optimismo y fe inquebrantable en la victoria", dijo Castro.

Los tres países, todos actualmente sujetos a sanciones estadounidenses, se encuentran entre los últimos bastiones de la gobernabilidad de extrema izquierda en América Latina en medio de una tendencia general hacia la derecha en los últimos años.

Desde la elección de Donald Trump como presidente de los Estados Unidos, las relaciones con Cuba se han deteriorado después de un acercamiento histórico bajo su predecesor Barack Obama.

Castro, hermano del difunto héroe revolucionario Fidel, dijo que el regreso de los gobiernos de derecha en la región y la hostilidad de Washington hacia la izquierda habían "despertado la euforia entre nuestros enemigos que sueñan con destruir el ejemplo cubano".

Vestido con uniforme militar, Castro habló en un evento que marca el 65 aniversario de un ataque guerrillero contra un cuartel militar visto como el inicio de la revolución cubana contra el dictador respaldado por Estados Unidos Fulgencio Batista.

Raúl Castro, quien tiene 87 años, asumió la presidencia cubana después de que Fidel renunciara por razones de salud en 2008. A su vez le entregó la presidencia a Miguel Díaz-Canel en abril.

Las relaciones bilaterales entre Estados Unidos y Cuba habían mejorado desde que Raúl llegó al poder, con la plena restauración de las relaciones diplomáticas en 2015: se disolvieron en 1961 después de que Cuba fomentó lazos estrechos con la Unión Soviética comunista.

Cuba se ha administrado como un estado socialista o comunista de un solo partido desde que Batista fue derrocado en enero de 1959.

Castro dijo que el bloqueo de Cuba dirigido por Estados Unidos se había "intensificado ... en particular la persecución de nuestras transacciones financieras".

También criticó las declaraciones sobre Cuba por parte de funcionarios estadounidenses como "irrespetuosos, agresivos, intervencionistas y manipuladores crudamente de hechos históricos".