El avance de la epidemia del ébola en África hizo que el gobierno de Liberia pusiera en cuarentena varios barrios, lo que aumentó los temores y la frustración de los residentes.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), cerca de 2.500 personas fueron infectadas por el virus del ébola en cuatro países de África occidental, y más de 1.350 fallecieron.
Liberia, el país más afectado por el virus, con 576 muertos, pasó a partir del miércoles comida y agua a los 75 mil habitantes del barrio periférico de West Point, que estaban en cuarentena. Algunos, sin embargo, se enfrentaron a las autoridades lanzando piedras y gritos de enfado contra la presidenta liberiana, Ellen Johnson Sirleaf.
“Esto es de nuestro interés, el gobierno ama a su pueblo y quiere que su gente esté bien y que esté saludable. Y hacerles saber que esta enfermedad es seria”, se justificó Meata Flowers, comisionada de West Point.
Por otra parte, Sudáfrica prohibió el ingreso de viajeros provenientes de Guinea, Liberia y Sierra Leona, a los que consideró de “alto riesgo”, para que el ébola no se extienda. La única excepción será si “el viaje es considerado absolutamente esencial”.
El ministro de salud de Sudáfrica comunicó que la OMS espera que el ébola continúe siendo una amenaza seria por lo menos durante otros 6 meses.
