Reino Unido prohibiría la exportación a Estados Unidos de tres fármacos usados para llevar a cabo inyecciones letales y pidió a otros países de la Unión Europea que hicieran lo mismo.
Las autoridades británicas confirmaron que introducirá controles adicionales a la exportación de pentobarbital sódico, cloruro de potasio, bromuro de pancuronio.
La exportación de otro sedante, tiopental de sodio, fue prohibida a fines de 2010 tras la demanda del grupo de derechos humanos londinense Reprieve al gobierno británico por exportar este sedante requerido legalmente para inyecciones letales en Estados Unidos.
Reino Unido, que se opone a la pena de muerte, a impuso entonces una exportación de emergencia del medicamento. Algo similar ocurrirá con las drogas detalladas, que todavía podrán ser exportadas a Estados Unidos para uso médico aprobado.
"Nos oponemos a la pena de muerte en todas las circunstancias y está claro que fármacos británicos no deberían utilizarse para llevar a cabo inyecciones letales", dijo el ministro de Empresas, Vince Cable, en un comunicado.
"Dado que los estados de Estados Unidos que llevan a cabo ejecuciones se están dirigiendo ahora a una compañía danesa, Lundbeck, para matar a gente, debemos esperar que Reino Unido pueda convencer a nuestros socios europeos de que adopten una línea similar", dijo el director de Reprieve, Clive Stafford Smith, en un comunicado.
La mayoría de los países europeos se oponen a la pena de muerte. El uso de inyecciones letales ha estado bajo creciente escrutinio por parte de grupos de derechos humanos y abogados que defienden a quienes aguardan ser ejecutados.
En diciembre de 2010, el Centro de Información de la Pena de Muerte dijo que Estados Unidos había ejecutado a menos personas en 2010 que en año anteriores, en parte por la escasez del tiopental sódico.
