El portavoz del Departamento de Estado, J.P. Crowley dijo que si bien el gobierno de Estados Unidos reconoce que Honduras ha hecho avances “a través de la comisión de reconciliación” establecida bajo el acuerdo de San José-Tegucigalpa, la situación de derechos humanos es motivo de preocupación.
Al ser consultado respecto al informe de la organización Human Rights Watch (HRW) sobre abusos a los derechos humanos durante el gobierno de Lobo, Crowley reconoció que no vio el reporte, pero que el tema de los derechos humanos es motivo de conversación permanente con el gobierno del presidente Porfirio Lobo.
“Nosotros estamos y seguimos preocupados sobre la situación de abuso de los derechos humanos en Honduras y es algo que hemos planteado en forma regular al gobierno de Honduras”, dijo Crowley.
El informe de HRW documenta 47 casos de amenazas y ataques, incluyendo 18 asesinatos contra periodistas, defensores de derechos humanos y activistas políticos bajo el gobierno de Lobo.
El portavoz dijo que es fundamental mejorar la situación de derechos humanos en favor de la propia sociedad hondureña y también para que haya una aceptación ampliación al regreso de Honduras al seno de la Organización de Estados Americanos (OEA), de donde fue excluida tras el golpe de estado que derrocó a Manuel Zelaya en 2009.
En tal sentido, Crowley dijo que “los países, incluyendo Estados Unidos, estamos atentos porque queremos ver que Honduras mejora las condiciones de derechos humanos para todos sus ciudadanos”.
