La organización Human Rights Watch denunció que en Honduras las agresiones y la intimidación contra los periodistas continúa desde que Porfirio Lobo asumió la Presidencia hace seis meses.
"Los ataques violentos contra periodistas y opositores políticos han inhibido fuertemente el ejercicio de las libertades fundamentales en Honduras", aseguró José Miguel Vivanco, director para las Américas de Human Rights Watch.
La organización pidió al gobierno hondureño que brinde el amparo necesario para que los periodistas puedan ejercer su trabajo, y llamó a que se juzguen a los responsables de las violaciones de los derechos humanos.
Asimismo, Human Rights Watch dijo que “los jueces temen ser destituidos por sus sentencias” e instó al gobierno de Porfirio Lobo que garantice la independencia del Poder Judicial.
Desde que Lobo asumió el 27 de enero de 2010, al menos ocho periodistas y diez miembros de una organización política que se manifestó contraria al golpe fueron asesinados, informó la organización.
"Los avances para restablecer el estado de derecho en Honduras desde el golpe de estado han sido muy limitados", dijo Vivanco.
"El gobierno debería proteger a los periodistas y miembros de la oposición política que reciben amenazas, impulsar la investigación y el juzgamiento activos de los abusos y reafirmar la independencia de los jueces".