Los analistas dicen que cuando la cumbre del G20 comience en Nueva Delhi el sábado, la ausencia del líder de China, Xi Jinping, probablemente eclipsará los esfuerzos para abordar cuestiones globales apremiantes como el cambio climático y la guerra de Rusia en Ucrania.
Beijing ha dicho poco sobre por qué Xi estará ausente. En un aviso de una sola frase en su sitio web el lunes, el Ministerio de Relaciones Exteriores anunció que el primer ministro Li Qiang asistiría en su lugar.
En una rueda de prensa celebrada más tarde ese mismo día, la portavoz del ministerio, Mao Ning, tuvo poco que añadir, sólo que “China siempre ha concedido gran importancia y ha tomado parte activa en los eventos del G20”.
Los analistas dicen que la decisión de Xi de saltarse la reunión plantea interrogantes y resalta las prioridades cambiantes de la agenda de política exterior de Beijing. Para empezar, dicen, no asistir significará perder oportunidades de interactuar con otros líderes mundiales al más alto nivel y mejorar las relaciones.
"China quiere ser un líder en diplomacia global, pero la ausencia de Xi contradice esa imagen", dijo a la Voz de América Moritz Rudolf, miembro del Centro Paul Tsai China de la Facultad de Derecho de Yale.
La decisión, añadió, también refleja el cambio de enfoque de la agenda de política exterior de China, que prioriza el compromiso con los países en desarrollo.
"(A partir de) la Cumbre BRICS y otros eventos diplomáticos, incluida la Cumbre China-Asia Central en mayo y el viaje de Xi al Oriente Medio, podemos tratar de ver un giro en la prioridad de la política exterior de China", dijo Rudolf, y agregó que el enfoque es sobre el Sur Global.
“La prioridad de la política exterior de China no está en la Cumbre del G20, ya que no es el foro del que China podría beneficiarse tanto. Para ellos será más fácil dar prioridad al próximo Foro de la Franja y la Ruta, donde celebrarán el décimo aniversario”.
China será la anfitriona de ese foro en Beijing el próximo mes.
Amigos cercanos primero
Desde que llegó al poder hace más de una década, Xi no se ha perdido ni una sola cumbre del G20. Este año, a pesar del levantamiento de las estrictas restricciones de COVID-19 en China y el comienzo de su tercer mandato, que rompe las normas, sus viajes al extranjero se han reducido significativamente.
Hasta ahora, Xi sólo ha salido de China dos veces: una para viajar a Moscú para reunirse con el presidente ruso Vladimir Putin en marzo y, más recientemente, para asistir a la Cumbre de los BRICS en Sudáfrica. Ambos son vistos como países amigos de China.
“Para que Xi visite un determinado país, incluso un foro multilateral, todavía se requiere una relación bilateral relativamente positiva”, dijo Yun Sun, director del programa de China en el Centro Stimson, un grupo de expertos con sede en Washington, a la VOA.
Algunos ejemplos que reflejan esta tradición incluyen la asistencia de Xi a la Cumbre del G20 en Indonesia y su participación en la Cumbre de APEC en Tailandia en 2022.
"Estos son países con los que China tiene relaciones relativamente buenas, por lo que no me sorprende que Xi se salte la Cumbre del G20 en la India", añadió.
Sun y otros analistas creen que las tensiones no resueltas entre China y la India contribuyeron a que Xi no asista a la Cumbre del G20.
"Desde el punto de vista chino, la India no está trabajando con China", dijo Sun. "China se ha estado quejando de que la India está utilizando el G20 y sus reuniones relacionadas para hacer valer sus reclamos sobre territorios en disputa".
Si bien China y la India han mantenido una serie de diálogos destinados a resolver las viejas disputas fronterizas, un nuevo mapa publicado por Beijing la semana pasada que mostraba el reclamo de China sobre los territorios en disputa llevó a Nueva Delhi a presentar una protesta diplomática.
Aparte de la persistente tensión con la India, otros analistas creen que los esfuerzos liderados por Estados Unidos para contrarrestar a China y el reciente apoyo militar de Washington a Taiwán también pueden haber contribuido a la decisión de Xi de saltarse la Cumbre del G20.
"La visita de Biden a la India y Vietnam se considera un esfuerzo para atrapar a China en Beijing, y Beijing está alarmado por el aumento de la ayuda militar de Washington a Taiwán", dijo a la VOA Zhiqun Zhu, experto en política exterior china de la Universidad Bucknell, en una respuesta enviada por correo electrónico.
¿Y la próxima APEC?
La reacción de los líderes mundiales a la decisión de Xi de saltarse la Cumbre del G20 ha sido mixta: el presidente estadounidense, Joe Biden, expresó su decepción con la noticia y el ministro de Relaciones Exteriores de la India, Subrahmanyam Jaishankar, señaló que la ausencia de Xi no afectará los esfuerzos de los líderes del G20 para producir una declaración.
Aunque algunos observadores dicen que será una oportunidad perdida, otros piensan que la decisión de China de no comprometerse con ciertos países es parte de un esfuerzo para lograr que cambien su comportamiento.
"Por ejemplo, si el objetivo es cambiar el comportamiento de Estados Unidos, algunos dirían que el hecho de que Washington haya enviado cuatro miembros del gabinete a Beijing desde junio es una buena señal de que la estrategia china está funcionando", dijo Sun, del Centro Stimson, a la VOA en una entrevista telefónica.
Queda por ver si el enfoque se aplicará también o no a la Cumbre de Líderes de APEC, que Washington celebra en San Francisco.
Las discusiones para una posible reunión al margen de la cumbre de noviembre aún están en proceso. Sun dijo que la participación de Xi podría verse afectada por la decisión de Washington sobre si permitirá que el presidente ejecutivo de Hong Kong, John Lee, participe en el evento.
El Washington Post informó en julio que la Casa Blanca había decidido impedir que Lee asistiera a la cumbre. "Si a John Lee se le niega la visa, los chinos lo verán como una gran pérdida de prestigio", dijo Sun.
Faltando alrededor de dos meses para la Cumbre de APEC, Sun dijo que un indicador importante de la participación pendiente de Xi es si el ministro de Asuntos Exteriores chino, Wang Yi, hace un viaje a Washington para allanar el camino para la ocasión.
"Si Wang va a Washington, será una fuerte señal de que Xi asistirá a la Cumbre del APEC", afirmó.
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