A pocos días de las elecciones presidenciales en Perú, el panorama aún es incierto sobre quienes pasarán a una segunda vuelta electoral.
Los candidatos aprietan las agendas y han intensificado su campaña proselitista tras el debate del domingo que según coinciden los analistas no fue aprovechado por ningún postulante para ganar más votos y convencer a los indecisos.
El ex presidente Alejandro Toledo, quien según las últimas encuestas está prácticamente en un empate técnico con Keiko Fujimori, seguidos por el ex premier Pedro Pablo Kucynski fue víctima de una agresión durante su campaña proselitista por el sur del país.
En Arequipa, desconocidos lanzaron piedras al vehículo donde viajaba, destrozando las ventanas de la camioneta.
El líder de la agrupación Perú Posible responsabiliza de este nuevo ataque a los seguidores de Ollanta Humala, su contrincante.
“Lamento lo que no pudo hacer Ollanta en el debate anoche, lo trató de hacer en las calles de Arequipa con su gente. Rompieron las lunas, era gente que gritaba su nombre”, dijo Toledo.
Toledo aprovechó además para preguntarle al candidato nacionalista las interrogantes que no respondió en el debate, lo cual fue duramente cuestionado.
“Él dice que va a cambiar la constitución, lo va a hacer al estilo de su amigo Hugo Chávez”, señaló Toledo.
Ollanta Humala, a quien se le acusa de impulsar un modelo estatista, en base a su plan de gobierno, en el que se plantea una reforma de la Constitución, prefirió no responderle a Toledo. A quien sí le respondió fue al presidente Alan García, quien también lo criticó por haber leído textos previamente redactados, durante el debate de los principales candidatos presidenciales.
Más allá de sus críticas, el presidente García dijo que todos los peruanos salieron ganando con el debate, tras mostrarse confiado que el próximo gobernante continuará el camino trazado.
Hasta el jueves (4/7/2011), los candidatos pueden realizar su cierre de campaña. Se sabe que el candidato nacionalista lo hará en provincias, mientras que sus contrincantes en la capital.
De acuerdo a la legislación peruana, está prohibido difundir los resultados de las encuestas una semana antes de las elecciones, esto fue hasta el último domingo, lo que genera más incertidumbre en la población.