El papa Francisco afirmó este jueves que asesinar en nombre de Dios es una "aberración", pero insistió en que "la libertad de expresión" no da derecho a "insultar" la religión del prójimo.
El pontífice se refirió así al ataque de la semana pasada contra la revista satírica Charlie Hebdo en París, en el que murieron 12 personas.
"Matar en nombre de Dios es una aberración", dijo a la prensa el sumo pontífice a bordo del avión que lo llevaba de Sri Lanka a Filipinas, donde continúa su gira asiática.
Sin embargo, el santo padre consideró que "todas las religiones tienen su dignidad" y "hay límites".
"No se puede provocar, no se puede insultar la fe de la gente, reírse de ella", insistió, y aseguró que "la libertad de expresión es un derecho y una obligación que debe utilizarse sin ofender".