Un avión no tripulado de EE.UU. dio muerte a un importante cabecilla de al-Qaeda al atacar con misiles un refugio de combatientes de la red terrorista en una zona tribal de la región de Waziristán del Sur, en Pakistán.
Ilyas Kashmiri figuraba entre los terroristas más buscados por EE.UU. y tras la muerte de Osama Bin Laden habría sido ascendido a comandar uno de los destacamentos de la red, la denominada "Brigada 313".
Un alto oficial de la inteligencia paquistaní dijo este sábado a la agencia Reuters que las autoridades de ese país estaban seguras de que se trataba de Kashmiri, y que estaban tratando de recuperar los cuerpos de los muertos en el bombardeo, en total ocho, para fotografiarlos.
En septiembre de 2009 se especuló que el terrorista había muerto en otro ataque llevado a cabo por un avión estadounidense sin piloto.
Una estación de televisión paquistaní citó una declaración hecha por Harkat-ul Jihad Islami, un grupo terrorista aliado de al-Qaeda y encabezado por Kashmiri, en la que se confirma su muerte.
El comunicado, cuya autenticidad no ha sido verificada, dice que “nuestro líder y comandante en jefe, Mohamed Ilyas Kashmiri, cayó como mártir junto a otros compañeros durante el bombardeo de un “drone” estadounidense el 3 de junio de 2011”.
El texto del mensaje señala: "Quiera Alá que pronto los estadounidenses puedan ver nuestra venganza. Nuestro objetivo es sólo Estados Unidos".
Según fuentes paquistaníes, Kashimiri se hallaba en compañía de varios talibanes cuando ocurrió el ataque, en una zona próxima a la frontera con Afganistán.
Durante los años 1980, Kashmiri formó parte de los guerrilleros que combatieron contra la ocupación soviética de Afganistán, y su grupo también enfrentó a las tropas indias en la disputada región de Cachemira.
Se le ha vinculado con los ataques terroristas de 2008 en la ciudad india de Bombay, en los que murieron 166 personas.
