El secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, demandó un esfuerzo de los países de Latinoamérica para intensificar la erradicación de las minas, que "hieren y matan a cientos de personas al año", muchas de ellas niños.
Insulza suscribió una declaración por el Día Internacional de Información sobre el Peligro de las Minas en la que señala que "podemos afirmar con orgullo que América Central es la primera región del mundo libre del impacto de este terrible flagelo".
Sin embargo, dijo que "en Colombia, estas armas causan el sufrimiento y la muerte a diario. En Chile, Ecuador y Perú las áreas minadas retrasan el desarrollo económico y obstaculizan una mayor integración".
Insulza agregó que pese a que "por primera vez en treinta años los centroamericanos pueden vivir y trabajar, libre de las amenazas que representaba este armamento”, todavía queda mucho por hacer.
Se necesita que haya más zonas libres de minas para conseguir "un continente en paz, encaminado a mejorar las condiciones de vida de su población". recalcó
El comunicado subraya el compromiso de la OEA por llevar adelante la misión y destaca el empeño puesto en la sensibilización sobre el riesgo en comunidades vulnerables y la destrucción de minas almacenadas.
También los esfuerzos hecho en la rehabilitación física y reintegración social de los sobrevivientes de accidentes por minas, y la recuperación socioeconómica de las áreas despejadas.