“La obra del maestro Botero es una obra monumental y no lo digo en el tema del tamaño, sino en su historia”, explica Julián Navarro, director de Context Miami, un espacio artístico en el sur de la Florida, en declaraciones a la Voz de América.
Según él, Botero destacó en el mundo del arte gracias a su trabajo “de más de cincuenta años creando una nueva iconografía”.
“Empezó a crear un nuevo diálogo en los sesenta y setentas, y no solamente impactó al pueblo colombiano o latinoamericano, sino que llegó a todas partes del mundo”, explica subrayando que “es uno de los pocos artistas que está en más de doscientos museos” y que eso “lo lleno a uno de orgullo de ser latinoamericano”.
Homenajeado en Miami
El artista colombiano falleció el 15 de septiembre en Mónaco, dejando atrás un gran legado cultural para las próximas generaciones. La exhibición que dirige Navarro, que se celebra de forma temporal y paralelo a Art Basel, considerada la feria de arte más importante de las Américas, ha dedicado una sección para rendir homenaje a Botero y así poner de manifiesto su “gran contribución” a esta disciplina.
“Es algo muy especial, pero al mismo tiempo es muy triste al no tener al maestro acá con nosotros después de tantos años y tantas obras lindas que nos dio no solamente a los colombianos”, relataba acerca del impacto que ha tenido la obra de Botero.
En esa línea, insistía en que “te guste o no te guste su iconografía, (Botero) es uno de los artistas más reconocidos del mundo” al considerar que fue un artista avanzado a sus tiempos y que fue pionero a la hora de utilizar ciertas técnicas para realizar sus obras, lo que llamó la atención de muchos coleccionistas y galerías.
“Puedes ir a Japón, Argentina, España, Bélgica, Rusia, a Estados Unidos, o a donde quieras, que vas a ver que todo el mundo reconoce su obra. Ha sido uno de los pocos, quizás entre los 10, que han tenido esa trayectoria”, sostenía al respecto.
"Contaba la historia que veía en ese momento"
Está convencido que una de las claves del éxito de Botero radica en que “fue una persona que contó la historia en su momento”. “En los sesenta contaba la historia de los sesenta, lo que estaba pasando en Colombia y en el resto de Latinoamérica. En los setenta, repitió lo mismo y cuando llegó a Nueva York, él empezó a escribir, dibujar y a hacer bocetos de la historia que estaba viendo”, subrayaba.
Recuerda que “él plasmaba no solamente en sus esculturas, sino en sus dibujos, lo que estaba viendo” y que “cuando pasó a hablar de la guerra de Irak, trató de reflejar eso en sus esculturas”.
“Eso es algo maravilloso, saber cómo desde sus inicios estaba contando la vida del mundo a través de sus ojos. Y, al mismo tiempo, creó una imagen, una nueva técnica, la del volumen, que hacía que las imágenes fueran un poco más grandes colocando objetos muy pequeños para que el volumen se agrandara mucho más”, declaraba convencido de que “es una cosa maravillosa lo que hizo”.
Pronostican "un aumento del valor de sus obras"
Las obras de Botero han sido muy valoradas entre los coleccionistas de todo el mundo, pero ahora que ya no está, está por ver si su obra se sigue revalorizando, como ha pasado con otros artistas tras su muerte.
“Mucha gente siempre dice que cuando el artista muere, los precios suben. No es así en todos los casos, porque tiene que ser un artista muy reconocido, muy bueno y que haya dejado una buena cantidad de obras, que haya estado en una gran cantidad de museos y que haya tenido grandes reconocimientos durante su vida”, comenta el responsable del espacio artístico en el sur de la Florida.
En este caso, Navarro, que no conoció personalmente al artista, pronostica que los precios de las obras de Botero “van a estar muchísimo más alto, incluso más que cuando estaba vivo”. “Vamos a ver un fenómeno en los próximos cinco o diez años en cómo todas esas obras van a ir creciendo”, decía recordando que “la mayor cantidad de obras que él dejó son únicas y es uno de los pocos artistas que no hizo litografía o ediciones de sus pinturas o dibujos”.