El funcionario estadounidense que supervisa la investigación sobre el papel de Rusia en las elecciones de 2016 sugirió el año pasado grabar en secreto al presidente Donald Trump y reclutar a miembros del gabinete para invocar una enmienda constitucional para expulsarlo de la Casa Blanca, informó el New York Times.
El vicefiscal general Rod Rosenstein hizo la sugerencia en la primavera boreal de 2017, después de que Trump despidió al director del FBI, James Comey, explicó el viernes el diario, que citó a fuentes informadas de los eventos o memorandos escritos por funcionarios del buró, incluido Andrew McCabe, quien asumió como director interino del FBI tras el despido de Comey.
Las propuestas no prosperaron, sostuvo el Times. The Washington Post también informó las discusiones, citando memorandos escritos por McCabe.
McCabe no tiene conocimiento de cómo estuvieron disponibles los memorandos, afirmó su abogado Michael Bromwich. En tanto, Rosenstein negó la historia del Times, calificándola de "inexacta y objetivamente incorrecta" en un comunicado en el que culpó a fuentes anónimas promoviendo intereses personales.
Agregó que "en base a mi trato personal con el presidente, no hay bases para invocar la 25a Enmienda", aseguró en comunicado.
Una portavoz del Departamento de Justicia también proporcionó una declaración de una persona no identificada que estuvo presente cuando Rosenstein propuso usar un micrófono para grabar a Trump, dijo el Times. La fuente sostuvo que Rosenstein hizo el comentario sarcásticamente.
Rosenstein inició discusiones sobre la 25a Enmienda de la Constitución, informaron el Times y el Post. La enmienda trata de la sucesión presidencial y la discapacidad y describe cómo el Consejo de Ministros tiene la capacidad de decidir si un mandatario ya no puede hacer su trabajo.
El Times reportó que Rosenstein le dijo al Departamento de Justicia y a funcionarios del FBI que las grabaciones secretas podrían usarse para exponer el caos del Gobierno tras las revelaciones de que Trump le pidió a Comey que le prometiera lealtad y también divulgó información clasificada a los rusos en la Oficina Oval.
La Casa Blanca no se refirió de inmediato al reporte, mientras que Trump no respondió a las preguntas de periodistas al llegar a Springfield sobre si despediría a Rosenstein.
El senador demócrata Chuck Schumer expuso que reportes de diarios no son suficientes despedir a Rosenstein.
Schumer aseguró que otros funcionarios en altos cargos se mantienen en su posición a pesar de mantener una actitud crítica hacia el presidente.
Rosenstein ha sido muy criticado por los seguidores de Trump por nombrar al Asesor Especial Robert Mueller en mayo de 2017 para encargarse de una investigación federal sobre las sospechas de injerencia rusa en las elecciones estadounidenses y una posible coordinación entre Moscú y la campaña Trump. Comey dirigió la investigación hasta que fue despedido.
El presidente, que regularmente caracteriza la investigación como una "caza de brujas", ha negado cualquier connivencia con Moscú, mientras que Rusia ha negado haber interferido en las elecciones.
Con información de AP