Estados Unidos pronto empezará a mandar de vuelta a México a personas que crucen su frontera sur de forma ilegal para que esperen en el vecino país mientras se procesan sus casos migratorios, dijo el jueves Kirstjen Nielsen, secretaria del Departamento de Seguridad Nacional (DHS).
El cambio en la política es parte de la iniciativa del gobierno del presidente Donald Trump de endurecer las leyes migratorias para que entren menos personas a Estados Unidos, tanto de forma legal como ilegal.
“Los extranjeros que traten de engañar al sistema para entrar a nuestro país de forma ilegal ya no podrán desaparecer dentro de Estados Unidos, donde muchos no llegan a sus audiencias en la corte”, declaró Nielsen en un comunicado.
“En cambio, van a esperar en México la decisión de una corte migratoria”.
Bajo el plan, "los individuos que lleguen o entren a Estados Unidos desde México, ilegalmente o sin documentación adecuada, podrían ser devueltos a México por el tiempo que duren sus procesos de inmigración".
El gobierno mexicano informó que fue informado de las intenciones de la administración Trump el jueves por la mañana.
"A las ocho de la mañana, el gobierno de Estados Unidos informó al gobierno de México que el Departamento de Seguridad Interna de Estados Unidos intenta implementar una parte de su ley de inmigración que permite regresar a los extranjeros no mexicanos a nuestro país para que puedan esperar el desarrollo de sus 'procesos de inmigración' en Estados Unidos" dice un comunicado del gobierno mexicano.
México ha anunciado que "temporalmente" permitirá el ingreso de "ciertas personas extranjeras" desde Estados Unidos que han ingresado a ese país a través de un puerto de entrada o que han sido detenidas por las autoridades de inmigración de ese país y han recibido una cita para asistir a una audiencia ante un juez de inmigración".
