Las fuerzas rusas atacaron el viernes una aldea que Ucrania decía haber reconquistado durante su contraofensiva en el sureste del país, en tanto Moscú acusó a Kiev de disparar dos misiles al sur de Rusia y herir a 20 personas.
Por su parte, el presidente Volodymyr Zelenskyy conmemoró el Día de la Nacionalidad Ucraniana, que reafirma la soberanía nacional, en una respuesta al presidente ruso Vladímir Putin, quien justificó su invasión diciendo que Ucrania nunca existió como nación.
“Ahora, como hace más de mil años, nuestra elección como civilización es la unidad con el mundo”, dijo Zelenskyy en un discurso en la plaza frente al monasterio de San Miguel en Kiev. “Ser una potencia en la historia mundial. Tener el derecho a su historia nacional, de su pueblo, su tierra, su Estado. Y nuestros niños, todas las futuras generaciones del pueblo ucraniano. ¡Decididamente, triunfaremos!”.
Rindió homenaje a las fuerzas armadas y entregó sus primeros pasaportes a los nuevos ciudadanos. La festividad coincide con la conmemoración del arribo del cristianismo a las tierras que más adelante serían Rusia, Bielorrusia y Ucrania.
El Ministerio de Defensa ruso dijo que derribó un misil ucraniano en la ciudad de Taganrog, a 40 kilómetros al este de la frontera con Ucrania, y las autoridades locales informaron de 20 lesionados. Identificaron el epicentro como un museo de arte.
Cayeron escombros sobre la ciudad debido al “ataque terrorista” de Ucrania, añadió el ministerio.
El secretario de Seguridad Nacional y Defensa ucraniano, Oleksiy Danilov, atribuyó la explosión a la defensa antiaérea rusa.
El Ministerio de Defensa ruso señaló que derribó un segundo misil ucraniano cerca de la ciudad de Azov, que al igual que Taganrog se encuentra en la región de Rostov del Don, y que cayeron escombros en una zona despoblada.
Horas antes, un dron ucraniano fue derribado en las afueras de Moscú, dijo el Ministerio de Defensa, en el tercer ataque o intento de ataque a la región capitalina en lo que va del mes. El incidente no provocó víctimas ni daños, dijo el ministerio, que no indicó dónde cayó el dron.
Desde que comenzó la guerra, Rusia ha acusado a Ucrania de ataques con drones, bombas y misiles en su territorio lejos del frente. Los funcionarios ucranianos raras veces se declaran responsables de esos hechos, entre ellos los ataques con drones que han trastornado a los rusos.
Han alcanzado depósitos de municiones y combustibles, así como los puentes que utilizan las fuerzas rusas para abastecer a sus tropas y bases de reclutamiento. También han matado a funcionarios nombrados por Rusia en territorio ucraniano.
Hace tres meses, un avión ruso dejó caer accidentalmente una bomba sobre la ciudad rusa de Belgorod, un incidente inicialmente atribuido a Ucrania y en el que resultaron heridas dos personas.
El comandante de las fuerzas ucranianas, el coronel general Oleksandr Syrskyi, dijo que sus tropas avanzaban en partes del este de Ucrania, donde encontraban una dura resistencia en el 18º mes de la guerra.
“El enemigo se aferra con ferocidad a cada centímetro, con fuego intenso de artillería y obuses”, dijo en un comunicado.