Las autoridades de Pakistán informaron que una explosión cerca de la frontera con Afganistán dejó 25 muertos y 26 heridos, haciendo de este el peor ataque de esta magnitud en meses.
Las autoridades dijeron que ellos creen que la explosión ocurrida este martes 10 de enero de 2012 en un mercado de la región tribal de Khyber fue operada a control remoto. Los testigos dijeron a los reporteros que tras el ataque se podían ver cuerpos desparramados en el lugar.
Cerca del sitio del ataque habían vehículos que son utilizados por milicias de partidarios del gobierno.
El ejército pakistaní apoya la formación local de milicias anti taliban, conocidas como “lashkars”, y los milicianos han estado atacando continuamente a miembros de la milicia y sus familias en los últimos años.
Hasta el momento nadie reclamó responsabilidad por la explosión, aunque esta clase de ataques son una táctica común de grupos militantes en la volátil región noroeste del país.
Desde el 2007, militantes islamistas, algunos ligados a al Qaeda, llevaron a cabo centenares de ataques con bombas en Pakistán, provocando miles de muertos.
Sin embargo no se registró otro ataque islamista suicida como el que dejó 312 personas muertas en un funeral de un anciano tribal opositor a los talibanes paquistaníes, en el pasado mes de septiembre de 2011.
Las fuerzas armadas de Pakistán colocaron bajo ataque a los milicianos de Khyber y sus áreas adyacentes por más de cuatro años.