La cuadragésimo cuarta edición del maratón de los Marines de Estados Unidos se realizó el domingo en Washington DC bajo una fuerte lluvia que no desanimó a los participantes de una de las carreras más populares en Estados Unidos, que atrae a maratonistas de al menos 25 países y que este año sumaron cerca de 30.000 asistentes.
El duro recorrido de 26.2 millas (42 kilómetros) permite a los corredores ver los populares monumentos y atracciones turísticas, aunque no se trate exactamente un paseo.
Hubo tres carreras el domingo, una de 10 kilómetros, la maratón y otra carrera de 50 kilómetros. Las tres carreras comenzaron a partir de las 7 a.m. bajo fuertes lluvias y vientos que para el ganador del maratón, Jordan Trompf, no fueron un problema.
"Me encantó la lluvia y la temperatura. La mayor parte de mi entrenamiento ha sido en 100 grados y con humedad. Tener la lluvia realmente funcionó para mi ventaja. Lo que realmente me retrasó fue el viento en diferentes puntos", dijo al diario The Washington Post.
La primera mujer que terminó el maratón fue Brittany Charboneau, de 31 años, de Colorado. Ella dijo que la lluvia era una bendición y, a la vez, una maldición.
"Creo que ayudó a mantener las cosas frescas, pero desafiante para superar algunas de las áreas difíciles", declaró Charboneau al medio WTOP.
Para muchos de los atletas profesionales y para el gran número de aficionados, este maratón que es el cuarta más grande de Estados Unidos, es una forma de acercarse a los militares estadounidenses que organizan el evento con gran entusiasmo.
El maratón se llevó a cabo en el mismo fin de semana que los juegos tres, cuatro y cinco de la Serie Mundial de béisbol entre los Nacionales de Washington y los Astros de Houston, encuentro que dejó en ventaja a estos últimos.