Los libios perciben a Moammar Gadhafi como algo ya “irrelevante” aunque los rebeldes que controlan Libia comprenden que el país no se habrá liberado totalmente hasta que el fugitivo ex gobernante no sea capturado, dijo un alto funcionario estadounidense.
La afirmación la hizo en Trípoli el secretario de Estado Adjunto de EE.UU. para Asuntos del Cercano Oriente, Jeffrey Feltman, el diplomático de mayor rango en visitar la capital libia desde que el Consejo Nacional de Transición (CNT) se hizo cargo de los destinos del país.
"Nadie sabe dónde está Gadhafi, nadie sabe a cuánto dinero tiene acceso (…) es como si hubieran seguido adelante pasándolo por alto", dijo Feltman, quien aseguró haber encontrado en Trípoli "una atmósfera sorprendentemente normal".
Sin embargo, precisó que el conflicto no terminará hasta que no caigan los últimos reductos en poder de las fuerzas que aún le son leales, incluida su ciudad natal, Sirte.
En una conferencia telefónica con la prensa después de reunirse con representantes de la sociedad civil y del CNT, el diplomático estadounidense, dijo que lo que más preocupa ahora a Washington en Libia es la posibilidad de una proliferación de armas.
Feltman señaló que el conflicto armado que puso fin a más de cuatro décadas de régimen de Gadhafi también abrió las puertas de los arsenales, y los nuevos líderes del país no han conseguido resguardar muchos de los depósitos de armas.
El diplomático dijo que EE.UU. ya tiene emisarios trabajando con los rebeldes para prevenir que lanzamisiles portátiles y sustancias químicas peligrosas como gas mostaza vayan a parar a manos indebidas.
"Este es un tema que nos preocupa sin duda y que le preocupa a las autoridades libias, ya que representa un riesgo potencial no sólo para los libios, sino a la región en su conjunto", indicó.
