Continúa el mundial en Qatar con su tercera jornada. Un día que generó seguramente sorpresas y donde solo Francia ganó 4-1 entre los anunciados equipos favoritos. Dinamarca no superó a Túnez, Argentina perdió 2-1 contra Arabia Saudita. Y México, a pesar de haber dominado contra Polonia, necesitó un milagro de su portero, Memo Ochoa, para parar un penal a Robert Lewandowski. Ahora, el próximo partido, dicen sus aficionados, será crucial. Alonso Fernández, aficionado de México: “La verdad es que queríamos estos tres puntos. Complicado ahora porque Argentina perdió hoy. Se nos complica el grupo y entonces va a ser decisivo el partido con Argentina para poder avanzar a la siguiente fase. Es el partido de la muerte, hay que sacarle al menos un punto a Argentina y tratar de avanzar.”
La derrota argentina fue un choque que puso fin a la serie de 36 partidos consecutivos sin conocer la derrota que tenía Argentina antes de llegar a este mundial. El evento fue tan excepcional que Arabia Saudita declaró un día de fiesta en su país para este miércoles. Los medios definieron este traspié como una pesadilla para Lionel Messi, quien dijo que no hay excusas por lo que pasó con su equipo. El camino para Argentina ahora se hace difícil pero sus fanáticos siguen optimistas aquí en Doha, mientras los de Arabia celebran.
Lisa Mancilla, aficionada de Argentina: “Tengo mucha fe para los próximos partidos. Yo creo que nos va a ir bien. [..] No voy a ser una mala perdedora. Jugaron bien, pero también nos anularon muchos goles, la pelota a lo último no quería entrar, porque tuvimos varias oportunidades. Así que, de verdad, fue tambien una cuestion de suerte.”
Y Abdullah Dashti, Aficionado de Arabia Saudita: “Nadie lo esperaba. Pero en el fútbol no hay que esperar quién va a ganar hasta que suena el pitazo del árbitro".
Y en este mundial, continúan las polémicas: en el partido del lunes, Gales contra Estados Unidos, a algunos fanáticos galeses se les incautaron pelucas que llevaban los colores del arcoíris, símbolo de la comunidad LBTQ, por la seguridad del estadio. A otro fanatico, con una camiseta de los mismos colores, no lo dejaron entrar.
