En un encuentro signado por la condena a las elecciones hondureñas, los mandatarios que participaron de la Cumbre de Jefes de Estado del Mercosur también abordaron algunos de los temas económicos y comerciales pendientes a resolver en el bloque regional.
El relanzamiento de los acuerdos entre el Mercosur y la Unión Europea para firmar un Acuerdo de Asociación Interregional fue uno de los asuntos más destacados de la cumbre.
Al respecto, el presidente uruguayo, Tabaré Vázquez, dijo que todos los presidentes del Mercosur están comprometidos en avanzar este proyecto.
El proyecto está “lamentablemente estancado”, dijo, pero “felizmente podemos relanzarlo y lo haremos muy rápidamente”, aseguró el mandatario, quien cedió la presidencia pro-témpore del bloque a la presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner.
Fernández dijo durante su intervención que en mayo habrá un encuentro entre el Mercosur, la Unión Europea y países de América Latina y el Caribe, a realizarse en Madrid.
“Creo que podemos desde el Mercosur cumplir una deuda que tiene 23 años, que es exactamente el cumpleaños del Mercosur, y poder arribar a un acuerdo con la Unión Europea”, aseguró.
Asimismo, la mandataria dijo que habló sobre el relanzamiento de las negociaciones con el presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, quien asumirá la titularidad de la Unión Europea para la próxima cumbre.
Resolver las asimetrías
Por otra parte, los mandatarios que participaron de la cumbre también hablaron sobre las asimetrías que existen entre los países grandes del bloque, Argentina y Brasil, y los más pequeños, Uruguay y Paraguay.
El presidente que planteó este tema con más dureza fue el paraguayo Fernando Lugo, quien dijo que Paraguay tiene “muchos conflictos económicos y comerciales con sus grandes vecinos”.
Ante la crisis económica mundial, el Mercosur respondió “con una agenda defensiva y proteccionista contra otros miembros de la región”, aseguró.
“En vez de buscar juntos sinergias entre nuestras economías, como forma de atenuar la crisis, se implementaron viejas fórmulas contrarias a la integración regional”.
Lugo dijo que la agenda proteccionista del Mercosur tuvo un impacto negativo sobre las exportaciones de Paraguay hacia los socios del bloque, y hasta septiembre pasado descendieron en un 32 por ciento.
“La balanza comercial del Paraguay con los demás países del Mercosur continúa altamente deficitaria”, aseguró.
“En los nueve primeros meses del año, acumulaba un saldo negativo de casi $ 600 millones de dólares. Y peor aún, año tras año se repiten aspectos preocupantes y muy significativos. Más del 90 por ciento de las exportaciones paraguayas a los países de la región son de productos con muy bajo valor agregado”, dijo.
Lugo llamó a que el Mercosur retome una agenda integracionista que tome en cuenta “las posibilidades de los Estados partes”.
Por su parte, la presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, llamó a que los países del Mercosur dialoguen de forma “seria, sin estridencias” sobre el tema de las asimetrías.
“Las asimetrías no se van a superar nunca desde el plano de lo estrictamente comercial”, dijo.
“Las asimetrías solamente se superan desde un plano de valor agregado de los productos, que cada uno de nosotros tiene en sus países y de complementariedad también de nuestras economías y de integración de nuestras economías en las cadenas de valor”.
La mandataria reconoció que los países que tienen economías de “mayor volumen” también tienen “mayores responsabilidades.
En este sentido, consideró que es necesario “simplemente analizar los números de la economía y adecuar los términos de intercambio, ver en qué necesitamos atacar las asimetrías y trabajar en construir un mercado potente”.