El secretario de Estado norteamericano, John Kerry, dijo que las posibilidades de alcanzar la paz en Siria dependen del éxito que pueda tener el proceso de entrega de su arsenal químico a la supervisión internacional, sobre lo cual discute en Ginebra con su contraparte rusa, Sergei Lavrov.
Los dos diplomáticos y sus equipos de expertos, se reunieron por segundo día consecutivo para discutir cómo realizar la entrega de armas químicas de Siria, y para intentar hallar una salida negociada a la guerra civil que desangra ese país.
Con este último objetivo, las reuniones incluyeron también al enviado especial de Naciones Unidas para Siria, Lakhdar Brahimi, quien ha estado presionando por una conferencia de paz internacional para poner fin a la guerra civil siria.
El secretario Kerry dijo que las delegaciones estadounidense y rusa han acordado reunirse de nuevo en Nueva York alrededor del 28 de septiembre, cuando se realice la Asamblea General de la ONU, donde se buscaría una fecha para la conferencia, “la cual obviamente depende de nuestra capacidad de tener éxito aquí en los siguientes días y horas en el tema de las armas químicas”.
El ministro Lavrov agregó que la reunión con Brahimi había sido “muy útil” y que sus sugerencias serían atendidas a medida que “se avanza paralelamente con el trabajo sobre las armas químicas”.
Kerry ha sido muy claro desde el primer día al advertir que una acción militar contra Siria continúa siendo una opción.
“El presidente Obama ha dejado claro que, si la diplomacia fracasa, sería necesaria la fuerza para disuadir y degradar la capacidad de Assad de usar esas armas. Puede que no se deshaga de ellas, pero podría cambiar su disposición a usarlas” afirmó el Secretario de Estado.
El presidente sirio, Bashar al-Assad, dijo a la televisión rusa que él renunciará a las armas químicas cuando Estados Unidos deje de amenazar con una acción militar.
Ente tanto, el embajador sirio ante las Naciones Unidas aseguró que su país es ahora un miembro total del Tratado Global de Prohibición de Armas Químicas, pero funcionarios de la ONU dijeron que recibieron documentos expresando la intención de Siria de firmar el tratado, indicando que es solo el primer paso del proceso.
Los dos diplomáticos y sus equipos de expertos, se reunieron por segundo día consecutivo para discutir cómo realizar la entrega de armas químicas de Siria, y para intentar hallar una salida negociada a la guerra civil que desangra ese país.
Con este último objetivo, las reuniones incluyeron también al enviado especial de Naciones Unidas para Siria, Lakhdar Brahimi, quien ha estado presionando por una conferencia de paz internacional para poner fin a la guerra civil siria.
El secretario Kerry dijo que las delegaciones estadounidense y rusa han acordado reunirse de nuevo en Nueva York alrededor del 28 de septiembre, cuando se realice la Asamblea General de la ONU, donde se buscaría una fecha para la conferencia, “la cual obviamente depende de nuestra capacidad de tener éxito aquí en los siguientes días y horas en el tema de las armas químicas”.
El ministro Lavrov agregó que la reunión con Brahimi había sido “muy útil” y que sus sugerencias serían atendidas a medida que “se avanza paralelamente con el trabajo sobre las armas químicas”.
Kerry ha sido muy claro desde el primer día al advertir que una acción militar contra Siria continúa siendo una opción.
“El presidente Obama ha dejado claro que, si la diplomacia fracasa, sería necesaria la fuerza para disuadir y degradar la capacidad de Assad de usar esas armas. Puede que no se deshaga de ellas, pero podría cambiar su disposición a usarlas” afirmó el Secretario de Estado.
El presidente sirio, Bashar al-Assad, dijo a la televisión rusa que él renunciará a las armas químicas cuando Estados Unidos deje de amenazar con una acción militar.
Ente tanto, el embajador sirio ante las Naciones Unidas aseguró que su país es ahora un miembro total del Tratado Global de Prohibición de Armas Químicas, pero funcionarios de la ONU dijeron que recibieron documentos expresando la intención de Siria de firmar el tratado, indicando que es solo el primer paso del proceso.