Un juez federal ordenó suspender la entrada por tierra de venezolanos en Brasil, en una decisión emitida el domingo pero que hasta este lunes no ha sido aplicada en la frontera, informaron las autoridades brasileñas.
“Decido de forma provisional suspender la admisión y el ingreso a Brasil de inmigrantes venezolanos a partir de la entrada en vigencia de esta decisión” hasta tanto haya condiciones para un “acogimiento humanitario en la región” del estado de Roraima, principal vía de acceso a Brasil, indicó el magistrado, Helder Girao Barreto.
La capital del estado, Boa Vista, ha acogido el mayor número de venezolanos, cuya llegada se intensificó en los últimos dos años debido a la grave crisis económica y política que enfrenta su país. Cálculos oficiales afirman que unos 25.000 venezolanos se encuentran en la ciudad, de cerca de 330.000 habitantes.
La orden no se había puesto en práctica este lunes y las operaciones en la frontera se realizan con normalidad, informó a la AFP la Fuerza-Tarea Logística y Humanitaria que actúa en la región para atender a los venezolanos.
Ese despacho del Ejecutivo precisó que el gobierno trabaja en un pedido para suspender la orden judicial.
Se estima que unos 500 venezolanos entran diariamente por la frontera terrestre. Aunque Roraima condensa el mayor porcentaje de migrantes, algunos continúan su viaje hacia otros estados o países como Argentina o Chile.
La gobernadora de Roraima, Suely Campos, aplaudió la decisión judicial. “Estamos pidiendo desde mayo el cierre de la frontera ante el Supremo Tribunal Federal, así como auxilio financiero para minimizar el impacto en nuestros servicios públicos”, dice un comunicado suscrito por Campos.
El presidente Michel Temer ha ratificado en varias ocasiones que la frontera no será cerrada. A la fecha once refugios operan en Boa Vista y Pacaraima, pequeña ciudad fronteriza, albergando a más de 4.000 venezolanos, incluyendo más de mil indígenas warao, del norte venezolano.
Campaña de vacunación
También el lunes, el Ministerio de Salud de Brasil lanzó una campaña de vacunación a nivel nacional contra el sarampión y la poliomielitis.
La iniciativa llega tras un brote de sarampión que afectó a más de 700 personas sólo dos años después de que la enfermedad fue erradicada del país más grande de Latinoamérica. A las autoridades médicas también les preocupa que regrese la polio a Brasil.
Los casos de sarampión se concentraron en su mayoría en estados del norte, en donde miles de refugiados venezolanos cruzan la frontera para huir de las dificultades económicas y políticas y un deteriorado sistema de salud. Muchos de ellos están enfermos y no se han inmunizado.
Brasil _que no ha cumplido con sus metas de vacunación_ no está preparado para recibir este tipo de recién llegados, dicen las autoridades.
El ministerio dijo el lunes que su objetivo es vacunar a 11,2 millones de niños menores a 5 años para finales de mes.
En el primer semestre de este año, 56.740 venezolanos han buscado formas de legalizar su situación en Brasil, 35.540 de ellos a través de la solicitud de refugio.
Con información de AFP y AP