Israel aprobó este martes seguir adelante con su plan de edificar 1.100 casas en el sector oriental de Jerusalén, lo que podría complicar los esfuerzos internacionales por renovar las negociaciones de paz entre israelíes y palestinos.
Después de que los palestinos presentaron en Naciones Unidas una solicitud para que se les reconozca como Estado, el Cuarteto para Oriente Medio, integrado por EE.UU., la Unión Europea, Rusia y la ONU, demandó que las conversaciones se reanudaran en un mes.
La decisión de Israel desoye el pedido también hecho por el Cuarteto de que ninguna de las partes tome medidas unilaterales que pudieran interpretarse como una provocación, puesto que los asentamientos serán construidos en la parte de Jerusalén reclamada por los palestinos.
Los palestinos reclaman esa parte de la Ciudad Santa capturada por Israel durante la guerra de 1967, y exigen que los israelíes no sólo dejen de construir nuevos asentamientos en el este de Jerusalén sino también en Cisjordania, como condición para reanudar el proceso de paz.
Saeb Erekat, principal negociador palestino, declaró que las nuevas viviendas hebreas suponen un “no” a la declaración del Cuarteto.
Mientras tanto, un portavoz del presidente palestino, Mahmoud Abbas, apuntó que “Israel está desafiando la voluntad de la comunidad internacional".
Las negociaciones de paz entre las dos partes fueron suspendidas el año pasado después de que Israel reanudó la edificación de asentamientos judíos en Cisjordania.
