Las autoridades israelíes accedieron este lunes a considerar preocupaciones de Estados Unidos sobre una planeada ofensiva en Ráfah, según un comunicado conjunto emitido tras un encuentro virtual con funcionarios estadounidenses sobre medios alternos para expoliar el sur de la Franja de Gaza de militantes de Hamás.
La reunión de dos horas y media encabezada por altos funcionarios de EEUU e Israel concluyó con un plan para futuras conversaciones presenciales tan pronto como la próxima semana, dijo el comunicado.
El presidente Joe Biden ha exhortado a Israel a no lanzar una ofensiva en gran escala en Ráfah para evitar más muertes de civiles palestinos en Gaza, donde las autoridades palestinas de salud dicen que han muerto más de 32.000 personas en los asaltos israelíes, aunque el Ejército israelí dice que un tercio de los muertos han sido militantes.
Los funcionarios estadounidenses, temiendo el empeoramiento de una crisis humanitaria en Gaza, han exhortado a Israel a probar otros métodos contra los militantes de Hamás sin lanzar una gran ofensiva.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, dijo el domingo que “no hay victoria sin entrar en Ráfah y no hay victoria sin eliminar a los batallones de Hamás allí”. Netanyahu aprobó un plan operativo militar para un ataque.
El ejército israelí ordenó a la mayoría de los palestinos refugiados en la zona que se trasladaran allí para escapar de los enfrentamientos en el norte de Gaza en las primeras semanas del conflicto de seis meses.
Israel ha dicho que protegería a los palestinos de una nueva guerra en Ráfah, ubicada justo al norte de la frontera entre Gaza y Egipto, pero no ha dado ninguna indicación pública adónde los trasladaría.
Tras la videoconferencia de este lunes, Estados Unidos dijo que espera que “equipos de expertos” sostengan más conversaciones en persona.
Estados Unidos ha sido el aliado más firme de Israel en la lucha contra Hamás, que inició la guerra con su impactante ataque del 7 de octubre contra Israel que mató a 1.200 personas y condujo a la captura de unos 250 rehenes.
El Ejército israelí dijo este lunes que sus fuerzas se retiraron del área del hospital de al-Shifa en el norte de Gaza después de completar una operación allí.
La retirada se produce dos semanas después de que las fuerzas israelíes lanzaron la operación en el hospital más grande de Gaza, acusando a los comandantes de Hamas de utilizar el sitio para llevar a cabo operaciones terroristas.
El ejército israelí ha dicho que mató a 200 militantes cerca del hospital, donde llevó a cabo combates terrestres y ataques aéreos.
Se encontraron cadáveres dentro y fuera del complejo hospitalario cuando la gente regresaba al lugar tras la salida de los tanques y tropas israelíes.
El Ejército describió la operación como una de las más exitosas en los casi seis meses de guerra y afirma que mató a decenas de milicianos de Hamás y otros grupos, incluidos miembros destacados, además de confiscar armas y conseguir información valiosa.
Gran parte de Gaza ha quedado en ruinas debido a la ofensiva israelí destinada a derrotar al grupo terrorista Hamás. Muchos de los palestinos refugiados en Rafah viajaron hasta allí desde otras partes de Gaza en busca de seguridad.
Un ataque aéreo israelí contra el hospital Al-Aqsa en Gaza mató a cuatro personas e hirió a otras 17, dijo el domingo el jefe de la Organización Mundial de la Salud, Tedros Adhanom Ghebreyesus, en una publicación en X.
Tedros pidió el fin de los ataques de Israel a los hospitales del enclave y la "protección de los pacientes, el personal sanitario y las misiones humanitarias".
El ataque a un campamento de tiendas de campaña dentro del complejo hospitalario fue presenciado por un equipo de la OMS que estaba en una misión humanitaria allí evaluando las necesidades y recogiendo incubadoras para el norte de Gaza, escribió el jefe de la OMS, y agregó: "Todo el personal de la OMS está contabilizado. "
Miles de personas se han refugiado en los alrededores del hospital después de que los combates los obligaron a huir de sus hogares.
Israel acusa a Hamás de utilizar los hospitales con fines militares y ha allanado varias instalaciones médicas. Dijo haber emprendido el nuevo ataque en Shifa después de que Hamás y otros milicianos se reagruparan allí.
Las autoridades de salud en Gaza niegan esas acusaciones. Los críticos acusan al Ejército de poner en peligro de forma imprudente las vidas de los civiles y de diezmar un sector de salud ya sobrepasado por los heridos de la guerra.
[Con información de AP Y Reuters]
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