La secretaria de Estado de EE.UU. Hillary Clinton se encuentra en Túnez, ciudad donde comenzaron las masivas protestas que se han extendido por la mayor parte del Medio Oriente y el Norte de África.
Clinton exhortó al gobierno interino de Túnez a implementar reformas que alienten el desarrollo económico. Indicó también que la revolución de Túnez creó esperanzas que ahora deben ser traducidas en resultados a través de reformas políticas y económicas.
Decenas de tunecinos se opusieron por la visita de Hillary Clinton, ya que lo consideran una injerencia extranjera en su país.
Clinton es la funcionaria estadounidense de más alto rango que visita Túnez desde que los manifestantes derrocaran al presidente Zine el-Abidine Ben Ali, el pasado mes de enero.
La jefa de la diplomacia estadounidense llega desde Egipto, donde se reunió con funcionarios del gobierno de transición en El Cairo. Allí pudo visitar la Plaza Tahrir, epicentro del levantamiento pro-democracia que llevó a la renuncia en febrero del ex presidente Hosni Mubarak.
La secretaria de Estado dijo que visitar el lugar fue “un gran recordatorio del poder del espíritu humano y el deseo de libertad, derechos humanos y democracia”.