El líder demócrata en el Senado, Harry Reid, dijo que presentará la próxima semana ante el pleno una iniciativa con la que buscará que el gobierno siga operando a los niveles actuales de gasto durante 30 días, a fin de evitar una parálisis por falta de presupuesto en marzo.
La medida del líder de la mayoría Harry Reid sigue una larga tradición de propuestas similares, pero fue rechazada de inmediato por los dirigentes republicanos, quienes criticaron al demócrata por Nevada al considerar que busca congelar el gasto a los niveles actuales, inflados por los generosos aumentos presupuestarios que se han otorgado bajo la gestión del presidente Barack Obama.
Para evitar la suspensión de las operaciones gubernamentales por falta de dinero se necesita una propuesta de corto plazo debido a que la Cámara de Representantes —dominada por los republicanos— aprobó el sábado una iniciativa de gasto por 1,2 billones de dólares para financiar al gobierno hasta el 30 de septiembre.
Ese proyecto abatiría los presupuestos de organismos gubernamentales en más de 60.000 millones de dólares en los últimos siete meses del año fiscal, lo cual dejaría temporalmente a numerosos empleados federales sin trabajo y desmantelaría varias regulaciones ambientales.
El proceso legislativo comprende el paso del proyecto por el Senado, controlado por demócratas. En consecuencia, una propuesta preliminar sobre el gasto es indispensable debido a que la necesaria solución de las diferencias tomaría semanas o incluso meses.
El presidente de la cámara baja, el republicano John Boehner, refutó la propuesta de Reid, la cual fue anunciada en un comunicado en el que Boehner es también acusado de maquinar un cierre gubernamental con sus insistencia en recortes inmediatos al gasto.
Una eventual suspensión de actividades gubernamentales ocurriría el 5 de marzo, y sería la primera desde los dos cierres parciales entre 1995 y 1996, incluido uno de tres semanas.
