A la presidenta del Comité de Relaciones Exteriores de la Cámara de Representantes de EE.UU., Ileana Ros-Lehtinen, le preocupa la participación de Haití el pasado fin de semana en una reunión del ALBA, el grupo de países aliados al presidente venezolano, Hugo Chávez.
Ros-Lehtinen encabeza una comisión bipartidista del Congreso que este miércoles se reúne en Washington con el primer ministro haitiano, Garry Conille.
Un comunicado difundido por la oficina de la congresista indica que dos años después el terremoto que devastó Haití, el país mejora económicamente, “pero también debe mejorar democráticamente”.
Refiriéndose a la presencia de Haití en la reunión de la denominada Alianza Bolivariana para las Américas (ALBA), Ros-Lehtinen dijo que “el fortalecimiento de lazos con tiranos antidemocráticos de la región minará las perspectivas de una verdadera prosperidad en Haití”.
La legisladora destacó que como resultado de los esfuerzos del pueblo haitiano, del gobierno de EE.UU., y de otros contribuyentes, es posible para Haití recuperarse de manera sostenida y lograr el desarrollo.
