El fabricante de autos estadounidense General Motors enfrenta creciente presión por la forma en que manejó un mortal defecto en ciertos automóviles, mientras surgió la noticia de que fiscales federales y dos comisiones del Congreso iniciaron una investigación del asunto.
La investigación se centra en si GM violó alguna ley con su lenta respuesta a un problema con los interruptores de encendido en automóviles compactos de modelos de 2003 a 2007.
También investigan el llamado a reparación de GM la Administración Nacional de Seguridad en las carreteras y seguridad en el tráfico y la Comisión de Energía y Comercio de la Cámara de Representantes de Estados Unidos.
Se trata de determinar porqué GM esperó hasta febrero de este año para llamar a reparación 1,6 millones de modelos más antiguos a nivel mundial, aunque admitió que estaba al tanto del problema hace una década. El defecto en los interruptores de encendido ha sido vinculado a 31 accidentes y 13 muertes.
La investigación se centra en si GM violó alguna ley con su lenta respuesta a un problema con los interruptores de encendido en automóviles compactos de modelos de 2003 a 2007.
También investigan el llamado a reparación de GM la Administración Nacional de Seguridad en las carreteras y seguridad en el tráfico y la Comisión de Energía y Comercio de la Cámara de Representantes de Estados Unidos.
Se trata de determinar porqué GM esperó hasta febrero de este año para llamar a reparación 1,6 millones de modelos más antiguos a nivel mundial, aunque admitió que estaba al tanto del problema hace una década. El defecto en los interruptores de encendido ha sido vinculado a 31 accidentes y 13 muertes.