Chevrolet Corvette Stingray, uno de los íconos estadounidenses, renovado totalmente el año pasado por su séptima generación, fue nombrado como el Auto Estadounidense del Año.
El premio, que se entregó en la víspera del “North American International Auto Show”, en la ciudad de Detroit; fue una doble victoria para la automotriz General Motors, que también ganó el premio al Camión Norteamericano del Año por su rediseñado Chevrolet Silverado.
También es la segunda victoria consecutiva por parte de la compañía GM, que ganó el año pasado gracias al diseño de su sedán compacto Cadillac ATS.
Este año, Corvette superó a los otros dos finalistas, Cadillac CTS y el Mazda3, una lista corta si recordamos todos los totalmente nuevos o significativamente rediseñados vehículos introducidos en el último año.
Sin embargo, ninguno de los otros contendientes sufrió una reinvención tan dramática como lo hizo el icónico Corvette, en comparación con sus últimas generaciones.
Este Corvette fue presentado hace un año en la misma feria internacional de autos. GM diseñó la séptima generación de Corvette para competir con el Porsche 911 y otros vehículos deportivos de clase mundial.
Sin embargo, este carro de $51,995 dólares (precio inicial) conserva sus características estadounidenses, es más ágil y más potente que su versión anterior. Su motor va de cero a 60 millas por hora en 3,8 segundos.
El modelo básico posee 460 caballos de fuerza, de 6.2 litros V-8, 25 caballos más que el motor de base de última generación, pero además una mejor eficiencia de combustible.
Este Corvette alcanza las 17 millas por galón en ciudad (27 km) y 29 mpg en carretera (46 km). Para ahorrar gasolina, el motor tiene un sistema de cierre de cilindro que permite que se ejecute en cuatro cilindros a velocidades de autopista.
Los ganadores a “vehículos del año” son seleccionados por un panel de 49 periodistas especializados en automóviles que han sometido a pruebas y conducido ellos mismos todos los vehículos en competencia.
El premio, que se entregó en la víspera del “North American International Auto Show”, en la ciudad de Detroit; fue una doble victoria para la automotriz General Motors, que también ganó el premio al Camión Norteamericano del Año por su rediseñado Chevrolet Silverado.
También es la segunda victoria consecutiva por parte de la compañía GM, que ganó el año pasado gracias al diseño de su sedán compacto Cadillac ATS.
Este año, Corvette superó a los otros dos finalistas, Cadillac CTS y el Mazda3, una lista corta si recordamos todos los totalmente nuevos o significativamente rediseñados vehículos introducidos en el último año.
Sin embargo, ninguno de los otros contendientes sufrió una reinvención tan dramática como lo hizo el icónico Corvette, en comparación con sus últimas generaciones.
Este Corvette fue presentado hace un año en la misma feria internacional de autos. GM diseñó la séptima generación de Corvette para competir con el Porsche 911 y otros vehículos deportivos de clase mundial.
Sin embargo, este carro de $51,995 dólares (precio inicial) conserva sus características estadounidenses, es más ágil y más potente que su versión anterior. Su motor va de cero a 60 millas por hora en 3,8 segundos.
El modelo básico posee 460 caballos de fuerza, de 6.2 litros V-8, 25 caballos más que el motor de base de última generación, pero además una mejor eficiencia de combustible.
Este Corvette alcanza las 17 millas por galón en ciudad (27 km) y 29 mpg en carretera (46 km). Para ahorrar gasolina, el motor tiene un sistema de cierre de cilindro que permite que se ejecute en cuatro cilindros a velocidades de autopista.
Los ganadores a “vehículos del año” son seleccionados por un panel de 49 periodistas especializados en automóviles que han sometido a pruebas y conducido ellos mismos todos los vehículos en competencia.