Miles de soldados Israelíes continúan una ofensiva terrestre en Gaza en un esfuerzo por detener los ataques con cohetes desde Palestina, luego de 10 días de intensa lucha entre Israel y Hamas.
La invasión por tierra comenzó la noche del jueves y su meta, según dicen, es llevar la paz a los ciudadanos israelíes y golpear seriamente a Hamas, que controla la Franja de Gaza.
El teniente coronel Peter Lerner, vocero del ejército israelí, dijo que Israel tiene dos objetivos: “Golpear a Hamas como organización terrorista, que así es considerada por todo el mundo, de manera que no tengan más motivos para continuar su agresión contra Israel. Y segundo, golpear la infraestructura terrorista, los cohetes, los túneles, los mecanismos que utilizan para atacar a Israel”.
Las acciones de Israel han aumentado la preocupación internacional de que el conflicto pueda convertirse en una guerra total.
El secretario general de la ONU, Bank i-Moon, respondió el jueves a la operación urgiendo a Israel a hacer un esfuerzo más grande para prevenir las víctimas civiles palestinas.
“Lamento que a pesar de mis repetidos llamados, y a los de muchos líderes regionales e internacionales, un conflicto que ya era peligroso se haya agravado aún más –dijo Ban. En las pasadas 24 horas, ha habido una serie de incidentes en que han muerto civiles, incluyendo el chocante asesinato de cuatro muchachos en una playa de la Ciudad de Gaza. Le pido a Israel que haga un mayor esfuerzo para evitar las muertes de civiles. No puede haber una solución militar a este conflicto”.
Desde la semana pasada, Israel ha bombardeado más de 2.000 blancos en Gaza y Hamas ha lanzado más de 1.000 cohetes hacia Israel.
Autoridades palestinas dicen que la cifra de muertos en el conflicto es 250 en su país, mientras dos israelíes han muerto también.