Francia realizará un minuto de silencio el 20 de marzo, en honor a las más recientes víctimas de los ataques que han sucedió en el sur del país. Tres niños y un profesor perdieron la vida el lunes 19 de marzo, después de que un hombre abriera fuego frente a una escuela judía en la ciudad de Toulouse.
Michel Valet, fiscal de Toulouse, dijo a los periodistas que un hombre en una motocicleta empezó a disparar a todos los que estaban frente a él y persiguió a algunos niños dentro de la escuela. Además de las cuatro personas fallecidas, un joven de 17 años terminó gravemente herido y actualmente está en el hospital.
Los asesinatos han dejado a Francia en conmoción. Al suceder solo unos días después de que similares ataques se realizan contra unos soldados franceses en la misma región, el tiroteo ha provocado el surgimiento de preguntas sobre posibles motivaciones religiosas o étnicas y alimentado preocupaciones sobre sentimientos antisemitas en Francia.
El presidente Nicolás Sarkozy, quien se apresuró a Ozar Hatorah, la escuela judía en Toulouse, dijo que todavía no está claro si los tiroteos en la escuela y contra los soldados, estaban relacionados.
Sin embargo, el presidente Sarkozy dijo que las autoridades estaban sorprendidas de ver la similitud entre ambos incidentes. Los ataques de la semana pasada, también en Toulouse y en el cercano pueblo de Montauban, acabaron con la vida de un soldado negro y dos musulmanes. En los tres casos, el asesino estaba en una motocicleta.
Los investigadores dicen también que se utilizó el mismo tipo de arma en los tres ataques.
El gobierno está reforzando la seguridad en todas las escuelas y edificios religiosos del país. Para los 700.000 judíos que se estima viven en Francia, esto no es una novedad. La seguridad fue reforzada hace una década, a consecuencia de una corriente de ataques antisemitas.
En una entrevista radial, Marc Pullman, secretario general regional por el Consejo Francés de Representantes de Instituciones Judías, CRIF, dijo que cuando el antisemitismo es trivializado, la gente no debe sorprenderse de que ocurran estos incidentes.
A tan solo un mes de las elecciones presidenciales en Francia, los tiroteos han provocado llamadas para aumentar la seguridad en las campañas electorales.
Francois Hollande, candidato del Partido Socialista, también se apresuró a viajar a Toulouse, donde dijo que quería “solidarizarse” con las familias de las víctimas.
Otros candidatos, incluyendo Marine Le Pen de la extrema derecha, así como diplomáticos israelíes y europeos, condenaron el ataque.
