La crisis que atraviesa Venezuela afecta de manera directa y particular a las mujeres. Así lo señalan organizaciones no gubernamentales nacionales durante la 63ava sesión la Comisión del Estatus de las Mujeres de las Naciones Unidas.
“El peso de la emergencia humanitaria compleja (que vive el país) sobre los hombros de la mujeres es desproporcionado, y además las afecta de manera diferenciada”, aseguró a la Voz de América Luisa Kislinger, activista de derechos de las mujeres y directora y fundadora de la ONG venezolana Mujeres en Línea.
Kislinger explicó que la coalición Equivalencia En Acción, conformada por cuatro ONG venezolanas dedicadas al tema, realizaron un estudio sobre la disponibilidad de métodos de planificaciones familiar y las condiciones de tres hospitales, para así determinar los obstáculos que tienen las venezolanas para acceder al servicio de salud sexual y reproductiva.
Este estudio, explicó la activista, reveló que en promedio hay una escasez del 85% de todos los métodos de planificación familiar. Los condones, agregó, son los métodos que más se consiguen pero a precios muy altos.
“Esto se ha convertido en un retroceso en materia de derechos para las mujeres”, afirmó Kislinger, quien agregó que el derecho a la autonomía reproductiva está amparado bajo la Constitución venezolana pero el Estado no lo está garantizando.
Sin método para regular la fertilidad ni los hospitales están aptos para el proceso del embarazo o para dar a la luz, la activista señala que “las mujeres (venezolanas) estamos viviendo como en el siglo XIX”.
Más datos
Equivalencia En Acción estuvo presente en esta sesión de la Comisión del Estatus de las Mujeres de la ONU junto a la organización internacional Women's Link para participar en el panel “Crisis de Protección y Servicios Sociales para Mujeres Venezolanas”
Durante su presentación, indicaron que la escasez de métodos anticonceptivos ha afectado a casi 10 millones de mujeres.
Las organizaciones también señalaron que algunas venezolanas embarazadas deciden convertirse en migrantes “para no correr el riesgo de morir”, además de que muchas salen de su país en búsqueda de mejores oportunidades.
También puede leer: Mujeres en la política venezolana: ¿“una igualdad de fotografía”?
Estas migrantes venezolanas no escapan de situaciones de violencia y discriminación, señalan las organizaciones, a pesar de que cuentan con una serie de derechos fundamentales que deben ser protegidos.
Algunas de ellas son víctimas de violación cuando cruzan la frontera por trochas o cuando están asentadas en Colombia, explican, y no están recibiendo la atención integral en salud.
Igualmente señalaron que algunas de estas embarazadas encuentran barreras para acceder a servicios, pese a que la atención está dentro de los servicios de urgencia que diferentes autoridades colombianas han ordenado para la población venezolana.
