Las autoridades de salud del sureño estado de Florida temen que la celebración del Día del Trabajo en Estados Unidos, el fin de semana pasado, se convierta en un propulsor en el aumento de casos de COVID-19.
Y es que ante un constante aumento de tasas de contagio y hospitalización por el coronavirus en el condado de Miami-Dade, la celebración del Día del Trabajo puede representar un riesgo por la imprudencia de quienes no siguieron las reglas, según reconoció el alcalde del condado, Carlos Giménez.
“Por favor, mantenga su distancia, mantenga su guardia, podemos tener un buen tiempo y podemos disfrutar el día de fiesta pero háganlo de una manera segura”, pidió el funcionario a los bañistas.
En Miami Beach, para evitar las aglomeraciones hay un toque de queda que se impone a partir de las 10 de la noche y además, se ha restringido el número de personas que integren los grupos de reunión.
“Grupos menos de 10, hay siete millas de playas así que hay bastante lugar para que la gente venga y disfrute pero que mantengan esa distancia social”, dijo Ernesto Rodríguez, vocero de la Policía de Miami Beach.
Además, el condado reforzó la presencia policial con patrullas tanto en las vías publicas como en la playa.
“Sabemos que vamos a tener más visitantes en nuestra ciudad y estamos listos, lo que le estamos pidiendo al público es que se comporten responsablemente", advirtió Rodríguez.
En Florida, han logrado disminuir las cifras a 2564 los nuevos casos de contagio por COVID-19, pero esa tendencia podría variar en las próximas dos semanas, que es el tiempo que según los médicos tarde en desarrollarse el virus, en caso de que los turistas hayan incumplido las restricciones durante esta celebración.