El Departamento de Estado financió en secreto a grupos de la oposición siria, incluyendo a un canal de televisión por satélite que transmite programación antigubernamental en ese país.
Nuevos cables diplomáticos revelados por WikiLeaks muestran que la cancillería estadounidense envió $12 millones de dólares a opositores del presidente sirio Bashar al-Assad, según reportó en un informe The Washington Post.
El periódico asegura que alrededor de $6 millones de dólares fueron asignados a Barada TV, con sede en Londres, emisora vinculada a un grupo de exiliados sirios llamados Movimiento para la Justicia y el Desarrollo.
El envío de dinero comenzó en 2006, durante el mandato del ex presidente George W. Bush, un año después de que este rompiera las relaciones diplomáticas con Siria.
El respaldo financiero continuó bajo la Administración Obama, si bien esta intentó retomar los contactos con Assad, señaló el Post. En enero de 2011, la Casa Blanca envió un embajador a Damasco por primera vez en seis años.
El periódico dice que el Departamento de Estado no quiso comentar sobre los cables de WikiLeaks y que Barada TV y el Movimiento para la Justicia y el Desarrollo no confirmaron si recibieron fondos de Estados Unidos.
Barada TV comenzó sus transmisiones en abril del 2009, pero intensificó sus operaciones para cubrir las masivas protestas en Siria iniciadas el mes pasado como parte de una larga campaña para derrocar al presidente Bashar al-Assad, informó el Washington Post.
Grupos de derechos humanos señalan que el levantamiento contra el gobierno de Assad ha causado la muerte a más de 200 personas. Las autoridades sirias culpan por la violencia a pandillas armadas.