La promesa de Boko Haram de lealtad al Estado islámico ocurrió tras semanas de un cierto flirteo terrorista entre ambos grupos extremistas.
Ahora los observadores se preguntan: ¿será que la proclamación tendrá algún impacto?
Analistas señalaron que esperan que el Estado islámico acepte la promesa de Boko Haram.
Desde mediados de 2014, los vínculos del grupo con sede en Nigeria con el califato han evolucionado de saludos a la emulación a lo que algunos ven como el principio de cooperación.
La producción de los videos de Boko Haram han mejorado dramáticamente este año, con gráficos más pulidos y una mejor calidad.
Incluso el líder de Boko Haram, Abukakar Shekau, conocido por sus estridentes diatribas, luce una entrega más pulida en un video publicado el mes pasado en la nueva cuenta de Twitter de la secta.
El paso final llegó cuando Shekau prometió lealtad al Estado islámico y dijo que reconocía la autoridad de Abu Bakr al-Baghdadi, en un mensaje de audio en árabe.
La declaración de Shekau, pronunciado en un tono solemne y formal, aparece cuidadosamente construida, según Bakary Sambe es un experto senegalés en los movimientos radicales islámicos en África y autor de un libro de próxima aparición sobre Boko Haram.
Shekau se está reposicionando como el líder de un movimiento que va más allá de las fronteras de Nigeria y tiene como objetivo construir un Estado islámico en la cuenca del lago Chad.
'Simbólico', por ahora
Sambe dice que la proclama es en gran parte "simbólica", al menos por ahora.
Es buena propaganda para ambos grupos y podría provocar una tendencia en el África subsahariana, añadió.
Boko Haram no estaría alterando significativamente su identidad ni sus ambiciones al unirse al Estado islámico.
Los grupos ya comparten una reputación de brutalidad y prácticas como la decapitación y el secuestro de mujeres y niñas.
La secta de Nigeria ha afirmado desde su inicio en 2009, que está luchando para restaurar el gobierno islámico en su parte del mundo.
Recientes videos Boko Haram han mezclado iconografía con referencias a Usman dan Fodio, fundador del poderoso califato de Sokoto en el siglo 19 el centro-norte de Nigeria.
Boko Haram ha hablado mucho de restaurar el imperio Kanem-Bornu islámico, que gobernó la cuenca del lago Chad por unos 10 siglos.
Objetivos territoriales
Una fusión de Boko Haram y Estado islámico complementaría los objetivos territoriales de cada uno, según el analista de terrorismo Yan St. Pierre.
"Esos objetivos territoriales se remontan a estos antiguos imperios", dijo. "En el caso de Estado islámico, el califato abarcaba hacia el sur de Francia y se extendió a medio camino a través del Sahel. Y desde ese punto al Sokoto y Kanem-Bornu . Y aquí es donde Boko Haram cubre el resto de ese territorio".
St. Pierre dirige una empresa de seguridad con sede en Berlín, MOSECON, que según él ha supervisado las comunicaciones entre Boko Haram y Estado islámico.
Las negociaciones se han centrado en "la forma de dividir el pastel financiero".
No está claro cómo la fusión va a funcionar en términos reales. St. Pierre dijo la inestable Libia serviría como probable corredor para la interacción y apoyo.
Una preocupación clave ahora es que un respaldo de Estado islámico a Boko Haram podría legitimizar a los nigerianos en los círculos yihadistas y ayudar a la secta atraer más combatientes, según los analistas.
El grupo ha perdido su control sobre gran parte del noreste de Nigeria en las últimas semanas, a raíz de una ofensiva conjunta de Nigeria, Chad, Camerún y Níger.
El poder del grupo parece estar disminuyendo, aunque esto ha ocurrido antes, solo para recuperarse posteriormente.