La diáspora venezolana está económicamente golpeada como consecuencia de la emergencia del COVID-19. En Nicaragua acompañamos a una familia que vive únicamente de la venta de arepas.
La diáspora venezolana está económicamente golpeada como consecuencia de la emergencia del COVID-19. En Nicaragua acompañamos a una familia que vive únicamente de la venta de arepas.