Nicolás Maduro asumió este viernes un tercer mandato consecutivo en Venezuela, en lo que ha sido calificado por la oposición como un golpe de Estado.
Expertos consultados por la Voz de América advierten que la tensión generada por la falta de transparencia y de verificación independiente de los resultados electorales es posible que desate un incremento en el éxodo de venezolanos hacia países vecinos, incluyendo Colombia.
“La gran mayoría no está de acuerdo con el proyecto político de la Revolución Bolivariana. Querían un cambio. Si ese cambio no se da, se verán obligados a salir a lo largo de los próximos años”, afirmó Ronal Rodríguez, docente investigador del Observatorio de Venezuela de la Universidad del Rosario de Bogotá.
“Muy seguramente no lo van a hacer de forma masiva como fue en 2019 o 2021, sino que por el contrario, va a ser un poco más graneado, más expansivo en el tiempo, porque ya es más difícil para muchos de ellos salir”, agregó.
La nación sudamericana ha experimentado desde hace más de una década una de las mayores crisis migratorias en América Latina, generada por la difícil situación económica, política y social.
Para los analistas, el tercer mandato de Maduro, en el poder desde 2013, rodeado de cuestionamientos por las graves violaciones a los derechos humanos y de denuncias de un recrudecimiento de las condiciones internas, traerá consigo una nueva ola migratoria.
“Lo que está pasando es complicado. Ahora bien, en general han sido 7 millones de venezolanos los que han salido aproximadamente, según ACNUR, muchos de ellos hacia Colombia, que ha sido el más grande receptor hasta el momento. Entonces lo que está pasando va a traer consigo un flujo mucho más grande de venezolanos”, comentó John Sánchez, abogado experto en migración y cofundador del Colegio Colombiano de Derecho Migratorio y Corporativo Internacional.
Retos ante un posible aumento migratorio
Colombia ha sido uno de los principales destinos para los migrantes venezolanos. La nación cafetera ha adoptado políticas abiertas de migración para población venezolana con programas que incluyen el derecho al acceso a salud, educación y empleo.
Rodríguez cree que aunque Bogotá ha dejado en los últimos años de lado sus políticas de integración migratoria, debe seguir buscando estrategias para hacer frente a este fenómeno migratorio.
“Tristemente, hay que decirlo. En los dos últimos años hemos perdido capacidad en políticas de integración migratoria. Creo que el Estado colombiano a nivel nacional, pero también hay que decirlo a nivel local, algunas alcaldías, algunas gobernaciones, han desandado el camino que se venía construyendo en Colombia en materia de respuesta migratoria”, explicó.
Sánchez, por su parte, opina que indudablemente la juramentación como presidente de Maduro por un sexenio más, seguirá siendo un punto de quiebre para que más venezolanos busquen mejores oportunidades fuera de su país.
“Colombia se tiene que preparar, a pesar de que ya ha tenido dos oleadas grandes de pueblo venezolano entrando al país. Fortalecer el acceso al empleo, la salud y la educación, así como la regularización migratoria para que no queden en la ilegalidad y no sufran abusos, por ejemplo a nivel laboral y a nivel salud en el país”, precisó Sánchez.
“No solo Colombia, sino el resto de la región deben ser receptivos y crear un plan de contingencia para la migración tan fuerte de venezolanos de población joven venezolana que va a migrar”, concluyó Sánchez.
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