La Dirección General de Migración y Extranjería (DGME) de El Salvador, defendió el miércoles la respuesta de los cuerpos de seguridad del país en un control migratorio en la Frontera El Amatillo, donde un grupo de hondureños “intentaban ingresar de manera irregular”.
En un comunicado, el director de la DGME, Herbert Hernández, informa que hasta las 2:30 pm de este día unas 661 personas habían recibido autorización para ingresar al país, de las cuales 415 pertenecen a la Caravana de Migrantes.
Otro grupo de unas 100 personas, se aglomeró en el Puente Goascorán, en la Frontera El Amatillo, intentando ingresar a El Salvador “en forma irregular”, y “se negaban a realizar el registro de control migratorio como lo establece la ley”.
Hernández, que también expuso la situación en un video, niega que la respuesta de los cuerpos de seguridad a este grupo de migrantes, haya entorpecido la movilidad de personas y mercancías en el lugar para entrar o salid de El Salvador. “Únicamente se está garantizando el orden y cumplimiento de la Ley de Migración”, añadió.
El director de Migración de El Salvador indicó que la agencia que dirige, y que trabaja conjuntamente en la frontera con otras instituciones como la Policía Nacional Civil y la Fuerza Armada, “actuaron amparadas en el cumplimiento de las disposiciones de Ley que establecen que si una persona no cumple con los requisitos de ingreso o se rehúsa a realizar el control migratorio están en la potestad de denegar su entrada, tal como se registró esta tarde”.