El arzobispo Gerhard Ludwig Müller, y el arzobispo de Seattle, Peter J. Sartain, delegado de la Santa Sede para analizar la situación de la LCWR, se reunieron con la organización de religiosas para aclarar el porvenir de las religiosas que están en la mira de la Santa Sede.
Leadership Conference of Women Religious, a la que pertenecen 57 mil religiosas, el 80% de las monjas de Estados Unidos, está en la mira del papa Francisco debido a los conceptos de las monjas como el aborto, la contracepción, la homosexualidad, la eutanasia y afirmaciones de feminismo radical incompatibles con la enseñanza católica.
Aparte de expresarles la "gratitud por el gran aporte" a la Iglesia en el país, los delegados del papa han manifestado la intención del Sumo Pontífice de aprobar el programa de reformas para las monjas "rebeldes".
El prefecto Müller enfatizó, en que tanto la Conferencia de Superiores Mayores como la LCWR existen para promover la cooperación con la Conferencia Episcopal local y con los obispos en particular.
"Por esta razón, dichas conferencias se constituyen y permanecen bajo la dirección de la Santa Sede", precisó Müller.
Desde 2012, el Vaticano, advirtió que Leadership Conference of Women Religious debe atenerse a las enseñanzas de la Iglesia y denunció su preocupación "tras los problemas doctrinales surgidos".
Leadership Conference of Women Religious, a la que pertenecen 57 mil religiosas, el 80% de las monjas de Estados Unidos, está en la mira del papa Francisco debido a los conceptos de las monjas como el aborto, la contracepción, la homosexualidad, la eutanasia y afirmaciones de feminismo radical incompatibles con la enseñanza católica.
Aparte de expresarles la "gratitud por el gran aporte" a la Iglesia en el país, los delegados del papa han manifestado la intención del Sumo Pontífice de aprobar el programa de reformas para las monjas "rebeldes".
El prefecto Müller enfatizó, en que tanto la Conferencia de Superiores Mayores como la LCWR existen para promover la cooperación con la Conferencia Episcopal local y con los obispos en particular.
"Por esta razón, dichas conferencias se constituyen y permanecen bajo la dirección de la Santa Sede", precisó Müller.
Desde 2012, el Vaticano, advirtió que Leadership Conference of Women Religious debe atenerse a las enseñanzas de la Iglesia y denunció su preocupación "tras los problemas doctrinales surgidos".