La administración Trump solicitó fondos adicionales para proteger la Torre Trump en Nueva York, contratar cientos de agentes del Servicio Secreto y reforzar la seguridad en la Casa Blanca, revelan documentos en el plan presupuestario presentado al Congreso.
La propuesta solicita 25,7 millones de dólares para gastos de seguridad en la Torre Trump, que incluyen costo de viaje del personal asignado a la protección de los hijos y nietos del presidente Trump, así como "otras funciones que respaldan esos detalles".
El pedido indica que los servicios serán mantenidos "el tiempo que dure la presidencia del mandatario".
La cifra es la primera que muestra con certeza lo que costaría un año completo de protección para el presidente, quien frecuentemente ha visitado sus propiedades en varios estados desde que asumió el poder el 20 de enero.
Destaca además lo que pagan los contribuyentes en beneficio de Trump. Del presupuesto solicitado 6,3 millones son asignados a "renta y pago de servicios" en la Torre Trump.
El mayor aumento incluye 1,3 millones de dólares para pagar nuevo personal, incluidos 75 millones para la contratación de 453 agentes especiales y guardias como parte de un plan para varios años.
La administración Trump dice que el dinero ayudará a "mantener el ritmo de los requisitos de la misión", llenando 7.150 nuevas posiciones para el fin del próximo año fiscal.
Otros 86 millones de dólares se solicitan para "proteger infraestructura y tecnología", estos incluyen más fondos para la protección de la Casa Blanca.
El Servicio Secreto enfrenta un trabajo más complicado que en el gobierno de Barack Obama, debido a que la familia de Trump vive fuera de Washington y viaja extensamente. La primera dama Melania Trump y su hijo Barron, viven en Nueva York, en la Torre Trump. Ellos se mudarán a Washington en el otoño cuando Barron termine la escuela, ha informado la Casa Blanca.
Los viajes del presidente Trump fuera de Washington han demostrado ser costosos. Un par de sus visitas más recientes a su mansión en Mar-a-Lago, en Florida, han costado más de 1,2 millones de dólares.
Los documentos sobre el pedido de fondos adicionales para protección del presidente, fueron publicados por el grupo conservador Judicial Watch, y solo reflejan los costos asociados con el avión presidencial, el Air Force One, y no incluyen los gastos del Servicio Secreto por la protección, ni los vehículos de apoyo que provee el Departamento de Defensa.
Un viaje de Trump a principios de febrero costó cerca de 670.000 dólares, un segundo viaje en marzo, costó 612.000 dólares, según la Fuerza Aérea, que opera y mantiene el Air Force One.
El Presidente ha visitado su mansión de Florida siete veces desde que asumió el poder. Mar-a-Lago no es solo su residencia de vacaciones sino un exclusivo club que cobra 200.000 dólares por la membresía. Trump también lo ha usado para recibir a líderes extranjeros y para reunirse con su gabinete y asesores.
Basado en reportes de viaje de otros presidentes, el Departamento de Defensa dice que los costos son mucho mayores que otros gastos relacionados con esos viajes.
Los recortes propuestos para el presupuesto del Servicio Secreto en el próximo año fiscal incluyen 12 millones para el National Computer Forensics Institute, que entrena al personal de seguridad estatal y policial, así como 30 millones para recomendaciones hechas por un panel de la agencia.
El Servicio Secreto reportó un ahorro de unos 140 millones de dólares al final de la campaña presidencial de 2016.
En resumen, el presupuesto solicitado para el Servicio Secreto es menos de un 1 por ciento mayor que el del presente año.