En víspera del Día de Acción de Gracias, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, acompañado por sus hijas, Sasha y Malia, celebró en el Jardín de las Rosas en la Casa Blanca, la tradicional ceremonia del "Perdón del Pavo" en ocasión de la principal festividad familiar que se conmemora todos los años en el país, Thanksgiving Day, el Día de Acción de Gracias.
El mandatario saludó a la nación y dijo: "en nombre de Michelle, Sasha, Malia y en el mío propio, feliz Día de Acción de Gracias a todos los estadounidenses y que Dios Bendiga a los Estados Unidos de América".
Durante la ceremonia, el presidente Obama anunció el perdón a dos enormes pavos de 20 kilos, llamados “Manzana” y “Sidra”, que se salvarán de ser sacrificados y cocinados para la cena más esperada por millones de estadounidenses.
Según la tradición, el plato principal ese día para la cena es un gran pavo asado, y en los últimos 63 años los presidentes han tenido por costumbre “indultar” a dos de estas aves.
Los nombres de los dos que esta vez se salvarán de no terminar sobre la mesa de alguna familia estadounidense fueron escogidos entre más de 200 propuestas enviadas por escolares de California.
Luego de la ceremonia, ambos pavos serán exhibidos al público en la hacienda de Mount Vernon, en Virginia, la antigua residencia del primer presidente de Estados Unidos, George Washington.
El Día de Acción de Gracias está asociado a la comida que celebraron los primeros colonos -peregrinos-, en Plymouth, Massachussets, en 1621, con los indígenas de la tribu Wanpanoag, y se le observa como una fecha para expresar agradecimiento, gratitud y aprecio a Dios, la familia y los amigos.
Muchos aprovechan el día no sólo para reunirse en familia sino también para preparar y servir comida a los necesitados en comedores populares, iglesias y residencias para personas sin hogar.
Aunque de origen religioso se le considera una festividad secular, y en Estados Unidos se celebra el cuarto jueves del mes de noviembre,