La Casa Blanca dijo este jueves que ha decidido renovar por un año más la “emergencia nacional en la frontera sur de Estados Unidos”, a partir del próximo 15 de febrero.
La oficina del Secretario de prensa informó en un comunicado que para el sábado 15 se declara “mediante la Proclamación 9844, una emergencia nacional (…) para hacer frente a la seguridad fronteriza y la crisis humanitaria que amenaza los intereses centrales de la seguridad nacional”.
El despacho señaló que la actual crisis de seguridad fronteriza “continúa amenazando nuestra seguridad nacional, incluida la seguridad del pueblo estadounidense”.
La disposición ha contado con el beneplácito del poder ejecutivo, que “ha tomado medidas para abordar la crisis, pero se necesitan más medidas para abordar la crisis humanitaria y controlar la migración ilegal y el flujo de narcóticos y delincuentes a través de la frontera sur de Estados Unidos”.
El pasado 4 de febrero, en su discurso ante el estado de la Nación, el presidente Trump insistió en su política migratoria de “seguridad fronteriza” y celebró los acuerdos de cooperación que su gobierno alcanzó con México, Guatemala, Honduras y El Salvador.
“Como resultado de esfuerzos sin precedentes, los cruces ilegales [en la frontera sur] han bajado un 75% desde mayo, reduciéndose por octavo mes consecutivo”, dijo Trump frente a la Cámara de Representantes.
El Departamento de Seguridad Nacional señaló el pasado mes de enero que “el presidente Donald Trump está usando todas las herramientas disponibles para abordar la crisis humanitaria y de seguridad en la frontera suroeste”.
El secretario de Seguridad, Ken Cuccinelli, aunque dijo que la seguridad fronteriza atañe a todos los países de la región, aseguró: “Estamos comprometidos a ayudar a nuestros vecinos con seguridad y prosperidad para sus ciudadanos”.