Estados Unidos enviará bombas de racimo a Ucrania, una munición prohibida por el derecho internacional.
Después meses de grandes reservas y fuertes presiones por parte de Kiev, la administración Biden determinó que su envío podría ayudar a Ucrania, que corre el riesgo de quedarse sin los proyectiles de artillería convencionales.
Jack Sullivan, Consejero de seguridad nacional de la Casa Blanca explicó: "Reconocemos que las municiones de racimo crean un riesgo de daño civil debido a las municiones sin detonar. Es por eso que hemos aplazado la decisión tanto como pudimos. Pero también existe un riesgo masivo de daño civil si las tropas rusas y los tanques pasan por encima de las posiciones ucranianas, toman más territorio ucraniano y subyugan a más civiles ucranianos. Debido a que Ucrania no tiene suficiente artillería, eso es intolerable para nosotros. Ucrania no usaría estas municiones en algún país extranjero. Este es su país que están defendiendo.”
El Pentágono enviará miles de bombas de racimo como parte de un nuevo paquete de ayuda militar por valor de hasta 800 millones de dólares para su esfuerzo en la guerra contra Rusia.
De acuerdo con el departamento de defensa, se proporcionará municiones que tienen una "tasa de fallas" reducida, lo que significa que habrá muchas menos rondas sin explotar que pueden provocar muertes civiles no intencionales.
El doctor Colin Kahl , subsecretario de Defensa para Políticas de EEUU, dijo este viernes: “El gobierno ucraniano nos ha ofrecido garantías por escrito sobre el uso responsable de las bombas de racimo, incluso que no usarán los proyectiles en entornos urbanos poblados por civiles, y que registrarán dónde usan estos proyectiles, lo que simplificará más tarde, los esfuerzos de desminado.”
Por ahora, los aliados estadounidenses reaccionaron con cautela a la noticia: si bien no criticaron a Estados Unidos y no se opusieron a la medida, Alemania y Francia dijeron que no harían lo mismo, mientras la OTAN no tomó posición, diciendo que es una elección individual de cada país.
Jens Stoltenberg, Secretario General de la OTAN, dijo: "Las municiones en racimo ya se usan en la guerra en Ucrania, por ambos lados. La diferencia es que Rusia está usando municiones en racimo para atacar, para invadir Ucrania, y Ucrania está usando municiones en racimo para protegerse contra un agresor".
La polémica por la aprobación de armas de racimo, le agrega un tema adicional de discusión que tendrán los países de la OTAN la próxima semana en Lituania.
El envío de las bombas separaría a EEUU de muchos de sus aliados más cercanos y podría complicar los esfuerzos de la alianza para demostrar unidad.
Por ahora Rusia no comentó sobre la noticia, pero Estados Unidos al principio de la invasión había señalado como crimen de guerra el uso de armas de racimo. Kiev estima que la nueva munición le ayudaría a ganar terreno atacando directamente a las fuerzas rusas atrincheradas que están ralentizando su operación de contraataque.