El presidente Donald Trump promueve la reforma de impuestos republicana en Hialeah, Florida, destacando las mejoras en las tasas de desempleo de los hispanos en el suburbio predominantemente latino de Miami.
Hablando un día antes de la fecha límite para la presentación de impuestos personales, Trump dijo que "Es la última vez que se va a completar ese largo, complicado y horrible declaración".
Prometió que el próximo año, una vez que la ley de impuestos se implemente por completo, presentar una declaración federal será "simple y fácil de hacer''.
Elogió la economía del país diciendo que "está empezando a sentirse'' el regreso de las empresas que estaban en el extranjero y la disminución de regulaciones para las corporaciones.
También aplaudio a su nuevo asesor de seguridad nacional, John Bolton, por los ataques aéreos del viernes en Siria. Mientras la multitud aplaudía, bromeó, "¿Le están dando todo el crédito? Sabes que eso significa el fin de su empleo''.
Trump también tenía planeado reunirse con empresarios locales en el área de Miami. Al encuentro debían asistir el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin; el secretario del Trabajo, Alex Acosta; y la directora de Administración de Pequeños Negocios, Linda McMahon.
Enfrentando vientos adversos en las elecciones de medio período en noviembre, los republicanos están poniendo sus esperanzas en convencer a los electores de los beneficios de la ley.
Trump planea recibir al primer ministro japonés Shinzo Abe en su club de Florida esta semana.