Una encuesta realizada por el Washington Post-ABC entre el 7 y el 10 de marzo revela que en dos meses los estadounidenses se han desilusionado de la manera cómo el presidente Barack Obama maneja la economía, comparado con la forma en que era percibido poco después de su toma de posesión.
El nivel de aprobación de su gestión disminuyó a 50%, 5 puntos porcentuales menos que cuando juramentó por un segundo término presidencial.
Después de ganar las elecciones en noviembre el presidente Obama sacaba una ventaja de 18 puntos porcentuales por encima de los republicanos en el manejo de la economía del país. Ahora las cifras están más parejas: 44% sobre 40%, dejándole a Obama solo un mínimo margen por encima de los republicanos.
Estas diferencias son aún más marcadas entre los independientes, quienes dos meses atrás aprobaban el trabajo de Obama con un 54%. Su nivel de aprobación entre éstos es ahora de un 44%.
Las nuevas cifras se revelan en un momento crítico en que el país enfrenta un recorte automático en el presupuesto y un desacuerdo entre demócratas y republicanos, que no ha podido consensuyar un presupuesto balanceado.
En la búsqueda para encontrar una solución Obama se está reuniendo cara a cara con los legisladores en el Congreso, y este miércoles se sentará con los republicanos en la segunda de tres visitas programadas al Capitolio.
En declaraciones a un medio de televisión, el presidente Obama señaló que su objetivo consiste en hacer crecer la economía poniendo a más personas a trabajar, controlando los gastos y haciendo algunos recortes, pero de una forma balanceada sin que todo el peso recaiga en los que menos ganan, las personas de la tercera edad y los estudiantes.
Según la encuesta publicada en el Post, en la historia de los presidentes de EE.UU. que han sido reelectos solo dos han alcanzado un nivel de aprobación de su gestión de 50% o menos. El primero fue George W. Bush y ahora se le une Barack Obama.
El nivel de aprobación de su gestión disminuyó a 50%, 5 puntos porcentuales menos que cuando juramentó por un segundo término presidencial.
Después de ganar las elecciones en noviembre el presidente Obama sacaba una ventaja de 18 puntos porcentuales por encima de los republicanos en el manejo de la economía del país. Ahora las cifras están más parejas: 44% sobre 40%, dejándole a Obama solo un mínimo margen por encima de los republicanos.
Estas diferencias son aún más marcadas entre los independientes, quienes dos meses atrás aprobaban el trabajo de Obama con un 54%. Su nivel de aprobación entre éstos es ahora de un 44%.
Las nuevas cifras se revelan en un momento crítico en que el país enfrenta un recorte automático en el presupuesto y un desacuerdo entre demócratas y republicanos, que no ha podido consensuyar un presupuesto balanceado.
En la búsqueda para encontrar una solución Obama se está reuniendo cara a cara con los legisladores en el Congreso, y este miércoles se sentará con los republicanos en la segunda de tres visitas programadas al Capitolio.
En declaraciones a un medio de televisión, el presidente Obama señaló que su objetivo consiste en hacer crecer la economía poniendo a más personas a trabajar, controlando los gastos y haciendo algunos recortes, pero de una forma balanceada sin que todo el peso recaiga en los que menos ganan, las personas de la tercera edad y los estudiantes.
Según la encuesta publicada en el Post, en la historia de los presidentes de EE.UU. que han sido reelectos solo dos han alcanzado un nivel de aprobación de su gestión de 50% o menos. El primero fue George W. Bush y ahora se le une Barack Obama.