El tradicional consejo de líderes de provincias, tribus y etnias afganas conocido como la Loya Jirga comenzó a sesionar este miércoles en Kabul para discutir qué condiciones tendría una futura asociación estratégica con Washington tras el retiro de las tropas de combate estadounidenses, previsto para el 2014.
Los cuatro días de reunión en los que toman parte unos 2.000 delegados fueron inaugurados por el presidente afgano, Hamid Karzai, quien dijo estar listo para establecer una asociación estratégica con EE.UU. que permita la existencia de bases militares en ese país, pero sin interferir en los asuntos internos de la nación.
"Queremos nuestra soberanía y la queremos ahora", dijo Karzai en su discurso de apertura de la asamblea, y agregó que si EE.UU. "quiere bases militares, se lo permitiremos. Esto nos conviene, recibiremos dinero y nuestras fuerzas serán adiestradas".
Karzai también llamó a poner fin a las incursiones aéreas y a las prisiones bajo control estadounidense y dijo que éstas deben estar bajo jurisdicción de los ministerios de Justicia y del Interior afganos.
Entre las condiciones formuladas por Karzai para crear tal alianza estratégica, está que las fuerzas estadounidenses y de la OTAN detengan las redadas en las viviendas de afganos y suspendan las operaciones nocturnas, dos cosas muy rechazadas por la población.
Según Gran Hewad, un investigador radicado en Kabul, no hay expectativas claras acerca del resultado de la Loya Jirga. “La agenda aún no está clara, aunque el gobierno por lo general ha dicho que discutirá la asociación con EE.UU. y el proceso de paz con Pakistán”.
La reunión tiene efecto bajo extremas medidas de seguridad, y algunos opositores al gobierno la han boicoteado porque la consideran inconstitucional.
“El líder del partido de oposición Abdullah llamó a sus seguidores a no participar en la Jirga, e incluso un par de grupos de legisladores y coaliciones parlamentarias rechazaron asistir a la reunión”, destacó Hewad.
Los talibanes han amenazado con atacar la conferencia e incluso difundieron en su página web los presuntos planes de seguridad del evento, información que luego fue tildada de falsa por el gobierno.
El lunes un terrorista suicida fue abatido cerca de donde sesiona la Loya Jirga y dos de sus cómplices fueron capturados. El número de puestos de control es ahora mayor y muchas calles en los alrededores han sido cerradas.
De acuerdo con el gobierno afgano, todo lo que sea acordado por el consejo de líderes tribales debe ser luego aprobado por el parlamento antes de que se convierta en ley.
